Una mesa navideña con un lechón asado, pan dulce y champagne; una de productos regionales con conservas de todo tipo; una con vajilla completa; y hasta un juego de dormitorio, por la módica suma de 2 pesos, que es lo que cuesta el bono para el sorteo. Esos son algunos de los premios que este año sorteará la comunidad educativa de la escuela Antonino Aberastain, en Pocito, durante el evento solidario que se convirtió en la segunda fiesta más importante del departamento, después de las Patronales en honor a Santa Bárbara. Se trata del Festival de Amistad y Sabores que la escuela comenzó a organizar hace 10 años con el objetivo de recaudar fondos para comprar material didáctico para los chicos. Y que este año fue declarado de Interés Departamental por el municipio. El fundamento: el crecimiento tanto del público que asiste al evento como de los colaboradores que donan los premios. El festival se en la plaza de villa Aberastain, esta noche a partir de las 21 horas, con la actuación de artistas locales.

En la escuela Antonino Aberastain ya se vive el clima de fiesta. Mientras los alumnos de los 3 jardines ensayan en el patio el tango, la chacarera y el ritmo latino que bailarán durante el festival, los demás apilan los alimentos y productos que los productores y comerciantes pocitanos donaron para sortear en este evento. Tal como lo hacen año a año, lo que permite que los números para el sorteo siempre pudieran venderse muy barato. Condición que año a año atrajo a más gente. Y de diferentes puntos de la provincia.

"Antes sorteábamos mesas con productos elaborados por los docentes y los padres, y entre los vecinos de la zona. Ahora contamos con importantísimos y con la presencia de personas que vienen de otros departamentos -contó orgullosa Norma Mercado, la directora del establecimiento-. Hay desde un juego de dormitorio hasta boletas de diferentes juegos de azar, todo donado, lo que nos permite vender muy barato los números para el sorteo".

La directora contó, además, que desde hace un par de años tienen que cortar las calles de alrededor de la plaza para hacer la fiesta, y poner a la venta 1.000 números, 800 más que antes, por la cantidad de personas que concurren a la misma. Sostuvo que con las recaudaciones de este festival se logró colocarle piso al patio de la escuela y hacer un tinglado para que los chicos tuvieran los actos escolares bajo techo. También comprar un televisor, un equipo de video y hasta un cañón multimedia para las charlas y conferencias que se dan en este edificio.

Por todos estos motivos este año, las autoridades de Pocito declararon esta fiesta de Interés Departamental y han decidido auspiciarla al considerarla el segundo evento social más importante del departamento.