Días atrás se desarrolló en una finca de la villa cabecera del departamento norteño, una novedosa reunión teórica práctica de capacitación en la labor de fertirrigación de cultivos anuales. Se congregaron en la propiedad rural de Ramón Villafañe más de 25 personas, entre productores hortícolas de esa zona, alumnos del último año de la Escuela Agrotécnica Dr. Manuel Belgrano, docentes e interesados en la temática. Luego de las presentaciones de los profesionales de la entidad, los ingenieros agrónomos Horacio Angelelli y Ariel Lucero, destacaron las virtudes tecnológicas que han llevado a los productores del Valle de Tulum, en San Juan y en el Valle de Uco, región sur de Mendoza y en el centro y norte de esa provincia, a obtener excelentes rendimientos en base al uso racional del riego por goteo y la complementación del agregado de fertilizantes, básicamente los macronutrientes (nitrógeno, fósforo y potasio) en forma líquida por las tuberías y cintas de riego. Los técnicos dieron a conocer generalidades de la forma de trabajar con estos equipos y luego pasaron a dar ejemplos específicos para el cultivo del tomate para industria, es decir el grupo de las variedades que integran los distintos peritas de mercado. Se habló del tiempo de avance del fertilizante, de la importancia de no mezclar distintos preparados y de la diferencia de aplicación entre una finca y otra, por ejemplo.
Luego se paso a la faz práctica agregando un fertilizante en el tanque y tomando el tiempo hasta que llegue a destino y se distribuya proporcionalmente en todo el lote del cultivo en cuestión. Se midieron los PH de las soluciones y las conductividades.
Los lotes de esa finca, de 3 fechas de transplante distintos, para distribuir mejor las fechas de futuras cosechas, y con las variedades Chicago, UG 19406, PS 70002 y Dri 319, fueron recorridos y analizados por los asistentes. Evacuaron sus dudas, y también practicaron con un equipo de riego por goteo instalado y funcionando.
Finalmente agradecieron a Barrick, empresa minera que está apoyando este proyecto de desarrollo desde hace varias temporadas y a Prune SA, firma que adquiere el tomate producido en este departamento y en Iglesia, donde hay otro módulo funcionando, similar a los de Jáchal, pero de una menor superficie.
