Una nueva jornada que revive los cruentos días del Proceso Militar, vivió ayer Mendoza con el inicio del segundo juicio por delitos de lesa humanidad.
Esta vez, son 10 los imputados entre ex policías y militares y 19 causas. Y entre los acusados y las víctimas, hay sanjuaninos.
El martes pasado en San Rafael sentenciaron a prisión perpetua y cárcel común a 3 de los 4 represores juzgados. En la primera etapa de este segundo proceso que se conoce como "plataforma fáctica" donde formalmente el juez eleva a juicio las pruebas y hechos investigados, se conoció que el ex comisario inspector retirado Armando Osvaldo Fernández Miranda, de 69 años y uno de los 10 acusados, nació en San Juan el 31 de noviembre de 1941. Desde joven se trasladó a Mendoza e inició la carrera policial donde, después de un tiempo, formó parte de "D2", la unidad de "Inteligencia" señalada por las víctimas como "un centro clandestino de detención y torturas" ubicado en la capital mendocina.
Por otro lado, entre los desaparecidos hay dos de San Juan: los estudiantes Juan Gutiérrez -de ingeniería- y María Alvarado -de Psicología-, perseguidos por su vinculación a Montoneros y detenidos en Mendoza a mediados de 1976, de los que no se pudo conocer más y se espera que se develen detalles durante el proceso.
El debate en Mendoza comenzó dos horas más tarde de lo previsto -a las 11-, luego que se tuvieran que solucionar algunos problemas técnicos para asistir con oxígeno a Juan Agustín Oyarzábal, uno de los acusados. De los 10 imputados, sólo 6 estuvieron en el recinto del Tribunal Oral y Criminal Federal Nro. 1 (el ex sargento Solustiano Lucero; Paulino Enrique Furió ex jefe de inteligencia del Ejército; el ex coronel Tamer Yapur -primer gobernador-interventor del Proceso, en Mendoza-; el ex sargento Luis Alberto Rodríguez Vázquez; el comisario retirado Eduardo Smaha Borzuk y el ex general Juan Pablo Saá -ex comandante de la VIII Brigada que incluye al Regimiento 22 de San Juan-).
Mientras tanto, el ex general Mario Lépori, el comisario inspector retirado Armando Osvaldo Fernández Miranda y el comisario general retirado Juan Agustín Oyarzábal, lo siguieron por circuito cerrado desde el Casino de Oficiales, a pocas cuadras del Tribunal, por sus delicados estados de salud. El que no asistió al juicio -también por problemas de salud- fue el ex teniente coronel Dardo Migno. Y el gran ausente fue Luciano Benjamín Menéndez, sobre quien el Tribunal decidió diferir el debate para otra ocasión, porque es sometido a otros juicios por hechos similares.
