Cincos sujetos comenzarán a ser juzgados hoy en la Sala III de tribunales por el brutal asesinato de Nelson Javier Silva, a quien golpearon en la cabeza hasta matarlo, todo porque éste les fue a exigir que le devolvieran la bicicleta que le habían robado a su hijo. El crimen sucedió la madrugada del 6 de marzo del 2010 y tanto la víctima como los acusados eran vecinos de la misma zona de Santa Lucía.
En el inicio del debate, los jueces Héctor Fili, Ricardo Conte Grand y Eugenio Barbera, en compañía del fiscal Eduardo Mallea y los abogados de las partes, tienen previsto hacer una inspección ocultar en la esquina del Bº Las Viñas, Santa Lucía, donde asesinaron a Nelson Javier Silva (40) esa fatídica noche del 2010. Los supuestos responsables de la tremenda golpiza que dio muerte a Silva son Luis Daniel ‘Toto’ Pastrán Posse (23), Sergio Andrés ‘Bocha’ Córdoba (33), Ariel Ricardo ‘El Chivato’ Ocampo (37) y los hermanos Gastón Alejandro (29) y Ricardo Gustavo Illanes (35). El primero está acusado de robo y homicidio, mientras que el resto sólo por el asesinato.
El que comenzó todo fue supuestamente Pastrán Posse y uno de sus amigos, que detuvieron a Marcos Silva (hijo de la víctima) en la calle cuando iba a comprar una gaseosa y, amenazándolo con un arma, le robaron su bicicleta en la esquina Lima y Larrain. El jovencito se fue asustado a su casa (a sólo 3 cuadras de allí) en Villa Pueyrredón y le avisó a su papá del robo.
Nelson Silva entonces sacó un revólver y salió furioso junto a su hijo a buscar a los ladrones. La requisitoria fiscal indica que Silva se encontró en una esquina con Pastrán Posse y sus amigos y le pidió que entregaran la bicicleta. Según su hijo, uno de los miembros de la patota hizo un disparo y luego su papá también largó un tiro al piso. En un momento, los sujetos dijeron que entregarían el rodado y, en eso que se lo estaban por dar, uno de ellos golpeó a Silva y lo tiró al piso. Ahí empezó la salvaje agresión. Testigos aseguran que Pastrán Posse le quitó el revólver a la víctima y con esa misma arma le pegaba en la cabeza, pero además todos le daban golpes de puño y puntapiés en la cabeza. Su hijo corrió a buscar ayuda, pero fue tarde. La agresión fue tremenda. Silva no se pudo defender y murió en una acequia.