El entrenador de River, Marcelo Gallardo, celebró ayer estar "cada vez más cerca" de la Copa Libertadores, cuyo candidato, evaluó, "por lejos era Boca". También se alegró por la vuelta de Pablo Aimar tras "casi un año y medio sin jugar" mostrando "destellos" de su calidad en los poco más de quince minutos que estuvo en cancha.
Gallardo dijo que espera mantener el plantel aunque prefiere liberar al jugador que se quiera ir del club, y "renovar" la plantilla para que haya "competencia interna". En una extensa entrevista por radio, el director técnico cuestionó la organización del fútbol en Sudamérica y fustigó que la Libertadores tenga un "parate" que dejará sin competencia a los cuatro semifinalistas.
En cuanto al Payaso, Gallardo se deshizo en elogios al sostener que "ayer (por el domingo) para todos los que amamos este deporte fue una alegría inmensa". "Después de un año y medio volvió a jugar un gran futbolista que nos volvió a deleitar. Es una persona de bien y está haciendo un esfuerzo tremendo por estar ahí adentro. Creo en sus condiciones y lo que nos puede aportar como futbolista y también como persona en los vestuarios".
