Federico García podría seguir estudiando tranquilo las materias que le restan de Psicopedagogía. Inclusive podría ocupar sus días con su trabajo como docente. Sin embargo, descubrió que era útil destinar parte de su tiempo en hacer algo por los demás. Con sus contactos y amigos de Facebook logró abrir una gran puerta para hacer una colecta solidaria. Bastó contar su idea para que muchos de ellos se sumaran. Tan es así que hace unos días llegó hasta San José de Las Talas, en Caucete, con un cargamento de donaciones conseguidas por Internet y acompañado por todos sus amigos de esta red social.
"Yo lo propuse en el Facebook y la verdad es que se armó una ola enorme: increíblemente un montón de gente se proponía para acompañarnos, donar cosas, poner movilidades para buscar cosas de gente que no podía acercarla. Fue una experiencia muy linda y esto demuestra que esta herramienta de Internet sirve para hacer muchas cosas buenas. Pero además que la motivación está en ser solidario y nada más porque esto no lo hacemos en nombre de nadie, ni inducidos por la política u otras intenciones", dice este joven de 28 años que quiere seguir en este camino de la beneficencia.
Hasta este pueblo caucetero donde no viven más que cincuenta familias y hay alrededor de 150 niños, llegaron no sólo con donaciones sino además con los elementos para armar un chocolate y divertir a los niños -con payasos, disfraces y juegos tradicionales- a la hora de la merienda. Entre otros, los acompañaron los integrantes del grupo de Circulistas de la Parroquia Cristo Rey, que también por su lado, reunieron donaciones.
La acción solidaria de Federico no es algo nuevo en su vida. Hace unos 5 años se había enterado de las necesidades de este lugar que está ubicado en las cercanías del cementerio de Caucete y dónde la mayoría de la gente no tiene un trabajo estable sino que trabajan haciendo changas o en las fincas. Además hay otra carencia: no tiene luz eléctrica en la mayor parte de las viviendas. Por eso, el joven se propuso juntar algunas cosas primordiales para la subsistencia, como alimentos no perecederos y ropa de abrigo. Con esos elementos llegó junto a un grupo de misioneros para difundir sus creencias religiosas. Otras veces, volvió al lugar, siempre con la misma consigna.
Hasta que ahora que se le ocurrió masificar su iniciativa a través de la ilimitada red social. Y tuvo buenos resultados. "Comenzamos a etiquetar gente para que se enterara de lo que hacíamos, les escribimos sobre esta iniciativa en sus muros y al cabo de dos horas empezamos a tener donaciones y se prendió mucha gente con buena onda en la movida solidaria que aportó juguetes, ropa, calzado, juguetes, globos", cuenta y adelanta que siguen juntando ropa y alimentos para volver en cuánto sea posible. Además un grupo de profesionales, entre ellos una nutricionista y un odontólogo, están armando algunas charlas para enseñarle a la gente del lugar a comer mejor y a cuidar sus dientes. Para eso, también piden donaciones de pasta de dientes y cepillos, como elementos que quieren dejar.
Aquellos interesados en sumarse a esta campaña deben contactarse con Fede García en el Facebook o enviarle un mail a fedelgarcia@hotmail.com.