Simpático, cálido, atiende el teléfono desde su casa en México, donde el argentino Noel Schajris vive desde hace muchos años, país donde creció musicalmente y que considera su hogar. El exintegrante de Sin bandera llegará a San Juan por primera vez el próximo 3 de octubre para actuar en Hugo, presentando su nuevo disco, Verte nacer dedicado a su hija Emma, de apenas un año. ‘Es una emoción grande, estuve cerca, pero no había ido a San Juan, me emociona conocer lugares nuevos’, dice, sincero, en la charla con DIARIO DE CUYO.
Afianzado en el mundo artístico latinoamericano, además de intérprete, Schajris ha sido convocado como compositor para otras figuras como Cristian Castro, Luis Fonsi, Claudia Brant, Paulina Rubio, colaboró con Alejandro Sanz y es autor del popular ‘Guapa’ de Diego Torres.
El músico se siente ‘muy cómodo’ como solista, pero no reniega de la popularidad que obtuvo con el dúo que formó con Leonel García, y asegura que en sus shows siempre tiene lugar para canciones de esa etapa (Te vi venir o Entra en mi vida fueron algunas de las más escuchadas). En la nueva producción, aunque no faltan las baladas, es un álbum con mucha energía, confirmando que se puede hablar de amor con más ritmo. ‘Otra vez, mi nuevo single es una canción de amor al 100 por ciento y bailable al 100 por ciento’, aclara.
-¿El nacimiento de un hijo, por ejemplo, es una bisagra para un músico?
-Son bisagras de la vida, del ser humano, ya no eres igual en el mejor de los sentidos, uno descubre un mundo que no sabía que podía existir, en mi experiencia te das cuenta que en el buceo oceánico del amor, eras un snorkista de la superficie. Cuando sos papá te vas a esas profundidades del océano del amor que antes te eludían. Un disco es la manera que tengo para expresar esas cosas. Amo el arte, la capacidad que tiene de elevarnos.
-¿Cómo es para el compositor que además canta, escuchar esas canciones que escribió para otro artista?
-Tengo claro que tengo esas distintas facetas de autor, del cantautor, y del intérprete. He hecho de todas en algún momento; de pronto les interesa lo que tú puedes aportar para un disco. Cuando uno hace un disco, en general se junta con mucha gente, porque uno nunca sabe de dónde puede salir la canción que cambia tu carrera, que conecta con la gente.
Tengo la fortuna de que me buscan mucho, que puedo generar canciones que sirven para otros colegas, y es un honor, una bendición y una responsabilidad. También una alegría, porque vas generando un catálogo, que si yo le dejo algo a mi hija, es eso, mi obra.
-¿Cómo analizas el presente de la música en castellano en América y el mundo en general?
-Está pasando un momento débil, aquí en México el 70 por ciento de lo que escuchas en las radios es en inglés. Volvimos a otras épocas. De hecho yo canté en inglés, pero creo que se está yendo todo al ‘joraca’, porque todo lo que escuchas aquí es en inglés, bachata o urbano… El pop y la balada en español están en una etapa de sequía, la más grande en 15 años. Realmente eso me perjudica, pero son momentos. Mi público sabe que hago lo que hago con amor, yo no voy a empezar a hacer bachata u otro estilo musical porque los tiempos lo pidan, no soy de cumplir modas. No me sentiría a gusto haciendo bachata porque es lo que suena.
-¿Qué tomás de Argentina y qué de México?
-Argentina es mi formación, donde nací, donde viví muchas cosas de adolescente; México es mi adultez, mis sueños, el poder surgir hacia el mundo como músico, como persona publica con Sin bandera primero y ahora como Noel Schajris, es mi casa hace 17 años, mi día a día. Son dos países tan importantes en mi corazón, que no compiten.
-¿Cuál fue la clave con Sin Bandera?
-Creo que la autenticidad, el amor por lo que hacíamos, y lo seguimos haciendo. Leo, como yo, seguimos amando lo que hacemos aunque nuestros caminos estén separados ahora. En Sin bandera confluyeron nuestros corazones y la pasión que le poníamos; la gente lo pudo sentir y lo sigue haciendo, porque son canciones que parecen vencer las barreras del tiempo y se siguen escuchando. Siempre hay un momento sinbanderístico en el show, sigue siendo lo que me representa, porque soy ese cincuenta por ciento de algo que marcó una época, un camino, ese orgullo no me lo quita nadie. Sigo siendo un Sin bandera.
-¿Qué reflexión te merece la muerte de Gustavo Cerati?
-Fueron cuatro años de lucha. Es muy difícil, me partió el corazón ver a su mamá; pero fue muy bonito ver el merecido tributo que la gente le hizo, cómo lo despidieron masivamente, con tanto cariño, como se merece un grande de la música. Él nos enseñó que la música de Argentina podía ser internacional. Todos aquellos que nos dedicamos a esto y soñábamos con salir hacia el mundo, Soda Stereo marcó esa pauta. El legado que dejó con Soda y como solista, es impresionante. Era un músico completo en todo sentido.
-¿Con quién te gustaría actuar que no lo hayas hecho?
-Uy, ¡con tanta gente! Soy fan de Bruno Mars, de Paul McCartney, sería alucinante aunque sea servirle café en un estudio, ¡olvídate! Soy beatlemaníaco, uno de mis sueños, era grabar en Abbey Road, y lo cumplí porque en 2009 grabe ahí, era como estar en el cielo.
