Emilse Sánchez es una paisana de Caucete e hincha de las travesías gauchas a caballo. Sin embargo, nunca participó en la Cabalgata de la Fe porque no se anima a cabalgar tantos kilómetros y porque es novata en el tema. Por eso ayer decidió hacer la Cabalgata a Punta de Agua, en 25 de Mayo como entrenamiento para que el año que viene pueda llegar a la Difunta Correa. Otras mujeres también participaron por el mismo motivo y porque recorren 40 kilómetros, con diferentes postas. Unos 500 gauchos, según los organizadores, están participando de la travesía que termina hoy.
Mabel Videla pertenece a la Agrupación Gaucha Punta de Agua y hace 2 años que participa de esta cabalgata, pero dice que aún no se siente preparada para hacer la Cabalgata de la Fe. ‘Creo que voy a cabalgar dos ediciones más en esta travesía para recién intentar ir a la Difunta Correa donde hay que recorrer muchos más kilómetros‘, sostuvo la paisana.
Pero la Cabalgata a Punta de Agua no sólo sirve de entrenamiento para mujeres, sino también para transmitir la tradición gaucha de generación en generación. Ayer, varios padres cabalgaron junto a sus hijos, algunos de tan 2 años de edad, que realizaron a caballo sólo parte de la travesía por el cansancio. El resto del camino lo completaron en las carretelas o sulkys.