Buenos Aires, 11 de mayo.- La nueva y peligrosa sustancia de "diseño" es conocida en el mundo del narcotráfico latinoamericano como GHB, aunque en las discotecas los compradores la llaman "viola fácil".
La droga se presenta en frasquitos, con gotero, lo que le permite al abusador mezclarla con facilidad en el vaso de su víctima. Los efectos de adormecimiento y pérdida de conciencia llegan a los 10 minutos.
Esta droga quita la voluntad de la persona engañando al cerebro. No tiene sabor, color y olor: no se puede detectar. Las víctimas luego de perder la conciencia también pierden la memoria de recuerdo temprano y no pueden recordar quién fue su violador, por ello no logran realizar una denuncia policial.
