La Corte Suprema de Justicia de la Nación deberá resolver una acción de amparo que presentaron padres salteños para que se deje de enseñar religión en las escuelas primarias públicas de la provincia, quienes se oponen a que los niños puedan rezar en horario de clase.

La Corte de Justicia de Salta hizo lugar al recurso extraordinario federal que habían presentado los demandantes para que sea el máximo tribunal de Justicia del país el que resuelva el caso.

La acción judicial se presentó en 2010 por iniciativa de diez padres y de la Asociación por los Derechos Civiles (ADC), que reclaman que la educación estatal sea exclusivamente laica pese a las costumbres de la sociedad salteña y a que la materia religión no es de cursada obligatoria. En febrero de 2012 el juez de primera instancia, Marcelo Domínguez, ordenó que se dejara de rezar durante el horario escolar para no obligar a los niños que no son católicos a participar de las oraciones. Domínguez consideró, sin embargo, que enseñar religión era constitucional y que esta materia debía sostenerse. Tras una apelación de los padres, en julio de 2013 la Corte de Justicia de Salta resolvió que se siguiera dictando religión.

El alto tribunal provincial también permitió que se siguiera rezando en las escuelas, aunque especificó que esta actividad debía realizarse sólo en las horas de religión. Ahora, el caso lo debe resolver la Corte Suprema de Justicia de la Nación.

La materia de religión es parte de la currícula para más de 200.000 alumnos que cursan la Primaria en establecimientos públicos de la provincia. Además, en muchas escuelas es una costumbre comenzar la jornada con una oración o ir a misa en horario de clase.

Las familias que iniciaron la demanda consideraron que la asignatura y las prácticas católicas en las aulas eran discriminatorias para los niños que no comparten este credo. “La enseñanza religiosa que se imparte en las escuelas de Salta restringe el derecho de las madres y de los padres a educar a sus hijos según sus convicciones, lo cual es incompatible con el deber del Estado de respetar la neutralidad en el ejercicio de la función pública, en particular en el ámbito de la educación”, difundió la ADC.

Los demandantes pretenden que se declare inconstitucional la ley de educación provincial, que establece que se debe impartir enseñanza religiosa. En la acción judicial se argumenta que la provincia puede vulnerar la libertad de culto y no respeta a las minorías. En este sentido, el Ministerio de Educación de Salta explicó que la asignatura de religión ‘no es obligatoria‘, por lo cual los alumnos pueden elegir quedarse afuera del aula durante esa clase, pero los padres consideran que esta alternativa también es discriminatoria.