Buenos Aires, DyN
Con la estela aún visible de la sorpresiva renuncia de Juan Román Riquelme, que significó el primer golpe para Diego Maradona como entrenador, el plantel del seleccionado argentino de fútbol puso ayer proa al enfrentamiento del sábado ante Venezuela, que significará el debut por los puntos del nuevo técnico.
La resignación y la vista puesta en un nuevo horizonte sin Román fue la reacción de varios de los jugadores, entre ellos Lionel Messi, Diego Milito o Javier Mascherano, al llegar ayer por la mañana a Ezeiza.
Un par de kilómetros más adelante, en el predio de AFA, el tema quedó disipado y los jugadores tras los saludos se sometieron a una revisión médica, a cargo del médico del plantel, Donato Villani, que esta vez tuvo la colaboración del médico deportólogo Néstor Lentini. Tras los estudios médicos, el plantel quedó licenciado hasta hoy, a las 16.30.
El único jugador que llegará hoy es el delantero del Nápoli Ezequiel Lavezzi.
Maradona ya tendría decidido jugar con esquemas diferentes ante Venezuela y Bolivia, en su altura de La Paz.
Ante Venezuela buscaría jugar con tres de fondo y tres en punta, y con Javier Zanetti integrado a la línea de volantes.
Es que Venezuela jugaría con sólo un punta y llevar una línea de cuatro para Argentina sería resignar material para el ataque.
Con el arco en manos de Juan Pablo Carrizo, la incógnita está en el cuarto mediocampista, y estaría entre Jonás Gutiérrez o Juan Sebastián Verón, que el domingo terminó con un golpe en el empeine del pie derecho.
Arriba estará el triunvirato integrado por Messi, Sergio Agüero y Tevez, y los postulantes para la línea defensiva son Martín Demichelis, Daniel "Cata" Díaz y Gabriel Heinze.
Para Maradona no sólo será el primer partido por los puntos tras las victorias sobre Escocia y Francia, en sus dos amistosos iniciales como conductor, sino la presentación en casa como técnico del equipo Albiceleste. Y, por si fuera poco, tendrá enfrente a un equipo al que le ha ganado todos los partidos, quince en total, y diez de ellos por Eliminatorias.
Así las cosas, Maradona no tiene margen ante los venezolanos, ya que un empate sería un desgaste al caudal de apoyo con que asume al frente del conjunto nacional.
A priori el de Venezuela -el único país de Sudamérica que nunca clasificó para un Mundial- en el Monumental aparece como uno de los partidos más accesibles de los ocho que le restan jugar por estas Eliminatorias. Claro, eso es lógica total. Y, se sabe, en el fútbol muchas veces no se da la lógica.
