Con música de Mercedes Sosa, muy suave, y un sahumerio encendido para disimular el olor a soldadura, comienza a trabajar ni bien amanece. Un trabajo que requiere de mucha concentración y precisión, y que según dijo, es uno de los más importantes de su carrera. Es Lorena Gómez Luluaga, la orfebre encargada de hacer las joyas que usarán las candidatas a Reina del Sol 2012 durante la noche de la elección en el Autódromo.
‘Me quería morir cuando veía a las candidatas usando aros industriales en la noche de la elección, cuando podían usar joyas artesanales y hechas por sanjuaninos, manteniendo el sentido localista que tiene la Fiesta del Sol. Estoy feliz al ver que los organizadores se dieron cuenta de este detalle, y más aún por ser la encargada de hacer este trabajo para las chicas‘, dijo Lorena en la intimidad de su taller donde, con paciencia y minuciosidad, y la colaboración de Cecilia Bueno, le va dando forma a cada una de las joyas que usarán las candidatas, y que su leit motiv no es el vino, como en el resto de la fiesta. Lorena contó que son aros y tiaras en alpaca que tendrán el Sol, logo de la fiesta.
Desde hace 11 años, Lorena se lanzó de lleno a la orfebrería, realizando trabajos para vender entre los amigos y familiares. Hoy sus productos son codiciados a la hora de hacer regalos empresariales o para ocasiones especiales. Lorena hizo los souvenirs que se le entregó a cada uno de los embajadores que visitaron San Juan cuando se realizó la Copa América.
‘San Juan es una tierra minera, por lo tanto la orfebrería debería ser una actividad reconocida para que se imponga como merece. Por eso doy talleres para que otros continúen con este arte. Además, con otras artesanas fundamos Arquetipas, un negocio de venta de productos de orfebrería que hacemos con nuestras propias manos. Estoy muy contenta y honrada de que me hayan encargado las joyas para las candidatas, por mí y por todos quienes se dedican a esta actividad‘, sostuvo.
Lorena contó que no tiene una fecha de entrega determinada para las joyas, pero dijo que las quiere terminar lo antes posible para que las chicas se las puedan medir y para evaluar si quedaron “perfectas”, de modo de poder rehacerlas en caso de que el resultado final no la satisfaga.