Humberto Osorio, el octavo y último refuerzo de San Martín, llegó al mundo verdinegro el 4 de agosto. Hoy se cumplen 20 días del arribo del delantero colombiano y aún no está habilitado para jugar. ¿El motivo? La falta de pago de su representante, Javier Verdugo, dueño de su pase, de la cláusula de rescisión del contrato que lo unía a préstamo con Millonarios de su país hasta fines del 2012. Según medios periodísticos colombianos ahí radica el enojo de la dirigencia de Millonarios y por eso aún no mandó la habilitación para que Osorio pueda estar a disposición de Facundo Sava. En tanto, la dirigencia sanjuanina, mediante el presidente, Jorge Miadosqui, ya puso en conocimiento a su par de la AFA, Julio Grondona, del caso y pidió la intervención de la FIFA, la cual podría expedirse en un plazo de 19 días. Ahora, resta que Millonarios haga su descargo en FIFA por el retraso de la habilitación y entonces el órgano máximo del fútbol tome una decisión, una de las cuales podría ser la habilitación provisoria del jugador hasta que se defina el caso.

Osorio firmó en diciembre pasado un contrato por un año con Millonarios en calidad de préstamo. En el vínculo se marcó que el club debía pagarle al representante de Osorio dos cuotas: una en enero que se abonó y otra que vencía el 31 de julio, la cual no se pagó debido a que el futbolista se fue antes. Sucede que la cláusula de rescisión es superior a la segunda cuota y entonces Millonarios no quiere dar el transfer hasta que el representante de Osorio no pague la diferencia. Debido a esta situación, Miadosqui mandó toda la documentación a la FIFA para que interceda. Grondona está al tanto del problema y habrá que ver si, una vez más, la muñeca del presidente de la AFA es capaz de torcer una situación que está más que complicada. “Hubo un mal entendido con mi pase. Espero que se defina pronto, Dios quiera que llegue lo más rápido posible porque tengo muchas ganas de jugar. Me siento muy bien en los entrenamientos, pero a la espera de la llegada del transfer”, subrayó Osorio ayer al salir de la práctica, donde se lo notó bastante molesto por la demora.