No fue una de las mejores tardes para el conjunto de Santa Lucía, no jugó bien y el equipo lucía desarmado. Pero lo importante es que el objetivo se cumplió. Atlético de la Juventud Alianza derrotó ayer por 1-0 a Gimnasia y Esgrima de Mendoza, en la 11ra fecha del grupo cinco del Torneo Argentino B.
La solución al la carencia de gol que tenía el equipo de Vázquez llegó con la entrada en el inicio del complemento de Aballay y Uranga, que cambiaron la cara del equipo.
El partido no fue de lo mejor, y tuvo tramos muy aburridos. Con escasas llegadas y un Lechuzo muy descolocado. Se jugó mucho en el medio de la cancha.
En el local, los que propusieron juego y salieron a buscar otro resultado fueron Paladino, Avila y Paratore.
A sólo 1 minuto, en un descuido de la defensa local, García remató al arco y Piana atajó. Posteriormente, un cabezazo de Paladino pero la pelota se fue afuera.
En Gimnasia, el generador de juego fue Matías Guerra, quién presionaba para convertir. El ex Unión inquietó con un pelotazo desde afuera del área, pero despejó la defensa. La más clara de la visita fue con un fuerte remate de Clavijo, la pelota rebotó en Coronel y luego el arquero se tiró para evitar el gol visitante.
Viendo que en el primer tramo Alianza no había reaccionado, Marcelo Vázquez propuso dos cambios desde la entrada del complemento. Por ello, Uranga y Aballay ingresaron por Burgo y Ojeda respectivamente.
A sólo dos minutos, casi sufre el local con un remate de Pistone que se estrelló en el palo. Otro de Báez que quedó en la manos de Coronel.
En el local, un remate de Paratore que se fue apenas desviado. El Lechuzo intentaba generar juego, pero era muy cortado por lo que costaba armar jugadas.
A los 37′ luego de un centro de Aballay, la pelota pegó en el hombro de Uranga y el delantero la empujó para decretar en 1-0 a favor del Lechuzo.
Gimnasia se fue con todo, pero la defensa estaba bien parada y despejó todo peligro, entre ellos un remate de Guerra que sacó Muñoz. Incluso Alianza hubiera podido aumentar su ventaja con un bombazo de Aballay sobre el final que se fue por arriba del travesaño.