Las operaciones de BP para detener la fuga de petróleo en el Golfo de México y recoger el crudo pueden suspenderse durante dos semanas si la tormenta tropical "Alex" obliga a interrumpirlas. Los meteorólogos no prevén que la tormenta pase directamente por encima del área, pero Thad Allen, el almirante del Servicio de Guardacostas, recalcó que "el tiempo es impredecible y puede cambiar en el último minuto".