Anoche, ante una sala colmada de amigos y amigas en el Teatro Sarmiento, Los Gajos de Pinono celebraron sus 25 años de trayectoria. El regreso de los hermanos Oro significó también el reencuentro de la cuyanía, compañeros de guitarras entre colegas de la talla de Daniel "Lechuga" García, Gustavo Troncozo y los músicos de Inti Huama, quienes participaron en la velada arriba del escenario entre cuecas y tonadas. Además, hubo un meritorio reconocimiento al aparcero Darío Bence y a Pelufo Barboza. César, Darío y Eduardo Oro, festejaron sus bodas de plata con el público de una manera cálida y familiar, como es característico en sus presentaciones.
El espectáculo inició con las palabras de bienvenida de la locutora Marcela Podda y un audiovisual, con el relato en off de Pascual Recabarren, los espectadores apreciaron en imágenes la historia de la familia Oro. Luego, las luces del teatro se encendieron y apareció en escena el trío con el vals "Hoy todo ha terminado", obra escrita de Raúl de la Torre. Posteriormente, Eduardo Oro tomó el micrófono y saludó a todos dándoles palabras de agradecimiento. "La verdad que nos sentimos acompañados en estos 25 años, como si fuera la primera vez", dijo el cantante. El concierto transportó imaginariamente a los espectadores, al típico patio de una casa cuyana, en donde los amigos se juntan a cantar serenatas. Así fue desarrollándose el encuentro, entre charlas, anécdotas y canciones. Además, la sorpresiva actuación de María Celeste Oro (hija de Darío), deslumbró a todos con su voz.