La Universidad de Buenos Aires (UBA) ha sido distinguida en un estudio internacional -elaborado por una consultora independiente de origen inglés-, como la mejor casa de estudios superiores de Iberoamérica, una calificación que superó a las prestigiosas universidades de Barcelona y San Pablo, con años de supremacía en esta área de escala global.
El denominado Ranking Internacional QS es similar al de Shangai en cuanto a la valoración de la educación superior que se imparte en el ámbito académico y se proyecta en la sociedad, entre varios indicadores. En el caso particular de la UBA, la calificación se ha sustentado sobre cuatro pilares específicos: investigación, calidad de la enseñanza, reputación empresarial e internacionalización.
Esto lo determinó el análisis de seis indicadores básicos, como las reputaciones que tiene la UBA en el medio académico y ante los empresarios, el ratio de estudiantes por profesor, las citaciones por facultad y la proporción de alumnos y profesores internacionales que dispone. Precisamente el Ranking QS evalúa anualmente los campos disciplinarios más sobresalientes e influyentes de la Educación Superior de todo el mundo, con el objetivo de brindar a la comunidad académica un informe detallado de cada universidad. En este caso, circunscripto al idioma.
Si bien la UBA ha obtenido este preciado galardón y con mayor mérito por haber ascendido 74 puestos con respecto a la tabla de 2014, todavía está lejos de las más prestigiosas universidades del mundo, ya que se encuentra en el puesto 124, de un total de 891 instituciones de educación superior analizadas. Los primeros puestos los ocupan el MIT, Harvard, Cambridge, Stanford, el Instituto de Tecnología de California y Oxford. Y, como primera en los países de habla hispana, la UBA superó a prestigiosas universidades como Humboldt (Alemania), Maryland (EEUU), Georgetown (EEUU), Hebrea de Jerusalén (Israel), Liverpool (Inglaterra), University College of Dublin (Irlanda) y todas las españolas.
Un ranking de estas características no alcanza a transmitir cabalmente la dimensión de la producción científica, la calidad de la enseñanza y la extensión de una universidad, pero son importantes las estadísticas porque sirven para conocer cómo se observa nuestra calidad educativa superior en el plano internacional. Es un gran prestigio global que influye tanto en la comunidad académica como en la imagen proyectada al exterior.
