Cada paso que da Villa Obrera en este torneo Federal B lo hace con determinación, eficacia y convencimiento de sus cualidades para sacarle provecho. Ayer, por la 3ra fecha de la Zona A de la Región Cuyo, se hizo grande en su cancha y venció 2-0 a Peñaflor. Victoria que lo dejó líder en soledad, mantuvo el invicto y golpeando en momentos claves de cada tiempo para no permitirle reaccionar al conjunto de San Martín.
El partido no fue vistoso, se jugó lejos de los arcos y con pocas ocasiones de gol. Pero en ese puñado de alternativas fue justamente donde el CAIVO sacó la diferencia y supo cuidarla apoyado en la falta de profundidad de Peñaflor.
El primer gol cayó a los 19’, cuando la Villa mostraba más juego asociado, aunque el tanto fue de tiro libre. Roberto Soria le pegó a rastrón, de frente al arco, y el balón ingresó pegado al palo.
Ese parcial inicial le fue favorable al local, que pudo ampliar a los 23’ pero Andrés González erró el frentazo entrando por el segundo palo. Igual se fue al descanso triunfando avalado por la firmeza de una línea defensiva que dejó sin opción a los sanmartinianos, a quienes les costó demasiado llegar al arco de Lionel Alcaraz y tampoco contaron con variantes para sorprender.
En el complemento las intenciones no cambiaron, aunque Peñaflor tuvo más determinación mientras Villa Obrera cuidó el resultado y por momentos le dejó el manejo de la pelota.
No obstante, fue el equipo que mejores chances tuvo. Sobre los 10’ González probó de afuera para marcar que ajustando detalles podía recuperar terreno. Y no sólo lo logró, sino que amplió el resultado dos minutos después. Toda la jugada la hizo Paulo Ovalles, quien encaró y dejó desparramado al arquero Fernández con una gambeta, para luego empujarla con el arco vacío, aunque cuando la pelota entraba, sobre la línea le terminó de meter Andrés González, para establecer el 2-0 que fue demasiado complicado para Peñaflor de revertir.
Y se notó cuando a los 17’, el remate de Pablo Nievas dio en el travesaño de la Villa. Le sirvió para ganar espacios e ir en busca del descuento, pero equivocó los caminos que le valieron a los chimberos para ganar y mirarlos a todos desde arriba.
