Que no se moviera ni dijera nada porque tenía un arma y podía matarla. Y porque cualquier oposición podría tener la complicación adicional de los cómplices que lo esperaban afuera. En la policía dicen que todas esas amenazas surtieron el efecto que esperaba el delincuente y que así consiguió reducir cualquier resistencia de su víctima para someterla sexualmente cuando estaba sola y dormía en su casa de Chimbas. El dramático caso tendría sin embargo una resolución rápida: Cuando un grupo de policías de la Brigada de Investigaciones, la comisaría 17 y el Comando Radioeléctrico se trasladaron a la casa de la víctima para interiorizarse del caso y llevarla a la Central de Policía para que un médico constatara las lesiones, la mujer reconoció a su agresor entre un grupo que bebían en la calle cerca de su casa y el sujeto, vecino de la joven, fue detenido en el acto.
Ayer en la policía aseguraban que con todas las evidencias recolectadas, el caso había quedado prácticamente esclarecido.
El hecho ocurrió alrededor de las 3,30 en una vivienda de la calle Fernández Barrientos, en la zona de El Mogote, en Chimbas. En la policía aseguran que el delincuente había entrado por una ventana del baño a la casa de la víctima, de 26 años, cuando estaba sola ya que su pareja no estaba por razones laborales.
Ese dato y el hecho de que tampoco estuvieran en la casa los hijos de la mujer con su primer matrimonio, al parecer eran conocidos por el delincuente quien no tuvo inconvenientes para reducir a la joven, dijeron en la policía.
De todos modos el caso quedó resuelto enseguida porque cuando la chica avisó al 911, enseguida llegaron a su casa un grupo de policías de la Brigada de Investigaciones a cargo del oficial principal Alfredo Luna, y también patrullas de la comisaría 17ma. y el Comando Radioeléctrico.
Luego de un primer contacto, la mujer fue trasladada para ser revisada por el médico y en el camino -dijeron- detectó a su presunto agresor, de 30 años, que ayer seguía detenido sin dar su versión de los hechos.
