Llevan seis años viajando a Cosquín, buscando hacerse un lugar en la meca del folclore. El domingo, el sueño comenzó a hacerse realidad cuando pisaron el escenario Atahualpa Yupanqui por primera vez. Los sanjuaninos de Labriegos ganaron el primer puesto en los espectáculos callejeros (elegidos por un jurado de músicos entre 800 espectáculos) la movida que ocurre en las afueras de la plaza Próspero Molina, por la que también pasaron años atrás artistas consagrados como Claudia Pirán y el Dúo Díaz Heredia. Y en la noche de cierre del festival, Labriegos (integrado por Juan Manuel Castro, Ricardo "Bebé" Martínez, Exequiel Morales, Cristian Balmaceda, Claudio "Katy" Martínez, junto a Juan Sarmiento y Héctor Olivera en producción), recibieron diplomas, una estatuilla y un poncho coscoíno, junto con el cálido aplauso del público que despedía la fiesta. Aunque finalmente no cantaron esa noche como les habían dicho, porque no alcanzó el tiempo, como ganadores de esta instancia, Labriegos ya tiene abierta la puerta para volver el año que viene y actuar en el escenario central.
Después del gran festejo, que duró hasta el amanecer del lunes tocando en la peña del grupo La Callejera, dos de los integrantes del grupo le contaron a DIARIO DE CUYO qué significó para ellos el premio.
"La verdad que fue un momento hermoso, realmente sí me hubiese gustado poder mostrarle a la gente mis canciones, pero seguramente con este logro no va a faltar oportunidad", comentó a este diario Katy Martínez, la voz líder de Labriegos, sobre la expectativa que tenían de cantar en la noche del domingo, momento para el que tenían lista la cueca El cosechero y un gato, Malas lenguas, ambas de autoría de Martínez. "Es uno de los escenarios más grandes y de renombre en el país, y lógicamente poder llegar con nuestra música cuyana a él es una satisfacción enorme. ¡Realmente me siento feliz!", confesó el músico.
En el mismo sentido, Juan Castro, el bajista del grupo, dijo que fue "algo increíble", y que además "es el laburo de mucha gente; por más de 6 años que la banda viene a Cosquín. ¡La primera vez la banda vino hasta acá en carpa!", destacó, rematando: "Hoy llegar a ganar esto es el premio al sacrificio, al esfuerzo de muchos años".
En 2014 acariciaron el éxito que hoy disfrutan, al recibir una mención entre los grupos que participaron de los espectáculos callejeros. Esta vez, pudieron subir la apuesta. "El festival es un monstruo, ayer (por el domingo) paseábamos por atrás del escenario y te topás con los grandes, con los que ves por la tele. Hoy somos parte de eso y es un sueño hecho realidad", expresó Castro, que dijo no tener palabras "para describir lo hermoso que es subir" al escenario de Cosquín. "Estar ahí te toca el alma", dijo para explicar la sensación que tuvo cuando recibieron el galardón.
Después de 8 días de actuaciones en las que pudieron mostrar todo su repertorio, los chicos de Labriegos se reencontrarán el sábado en el cruce de las peatonales con el público local, y ya preparan un mega festival para presentar su segundo trabajo discográfico. Por lo pronto, ayer dejaron Cosquín con la estatuilla bajo el brazo y el corazón contento.