San Juan, 25 de abril.- Desde los primeros días de enero, cuando el Ejecutivo provincial decidió prohibir definitivamente el uso de polarizados en los vehículos, los comercios que se dedicaban al rubro comenzaron a buscar alternativas para evitar su desaparición. Es por ello, que del polarizado se pasó a la colocación de un nuevo sistema que ayuda a evitar los ataques de los delincuentes y motochorros en los vehículos, las láminas blindadas.
Según explicaron, la lámina, que se denomina blindaje anti-asalto, tiene un precio que arranca desde los $500 para cubrir todo el auto. Posee 280 micrones de grosor y no permite que traspasen hacia el interior del vehículo, ni piedras ni tampoco proyectiles. Además, vienen transparentes y también con una tonalidad de hasta un 30%.
Los comerciantes también contaron que "por semana, hay unos 25 pedidos de este tipo de blindaje, es decir un 60% de todos los trabajos que se realizan". En el mismo sentido, señalaron que la mayoría de las personas que optan por el nuevo sistema son de sexo femenino. "El 70% de los clientes son mujeres, ya que son las que más temor le tienen a los ladrones. Siempre dejan la cartera en el asiento y eso atrae a los ladrones que, con un piedrazo, rompen el vidrio y concretan el robo. Pero con el nuevo sistema, el vidrio no se desgrana y se le complica un poco más al delincuente para perpetrar el asalto", expresó Javier, propietario de uno de los locales consultados.
En cuanto al polarizado común, los comerciantes explicaron que se continúan haciendo, ya que no esta prohibida su colocación, sino el uso. “Seguimos haciendo, no en la misma cantidad que hacíamos antes por supuesto, pero hay gente que corre el riesgo y contrata la colocación del sistema. Principalmente lo hace por un tema de seguridad, ya que con el polarizado no se puede ver con claridad el interior del vehículo”, explicó otro de los comerciantes consultados, siendo el común denominador en el rubro.
