Buenos Aires, 30 de abril.- Lanús y Tigre se pusieron al día en el Torneo Final con un encuentro que arrancó con un vertiginoso ritmo. La obsesión por los tres puntos la tenían ambos equipos dado que los de Victoria necesitaban sumar para alejarse del descenso, mientras que el "Granate" quería acercarse a Gimnasia, para llegar con mejores posibilidades al compromiso del domingo ante el "Lobo".
Una gran combinación entre Ariel Nahuelpan y Kevin Itabel, en el inicio del espectáculo, fue la primera advertencia para Agustín Marchesín, quien tuvo que esforzarse para sacar un complicado remate a mano cambiada.
La polémica de la noche bonaerense la protagonizó Matías Pérez García. Tras una primera etapa sin emociones, el grito pudo derivar de un contragolpe perfecto que dejó a tres hombres del "Matador" ante la misma cantidad de defensores locales. Pero el talentoso volante se la jugó por la individual y cuando quiso eludir a Diego González se encontró con una mano del "Pulpo" que lo hizo retroceder. A pesar del pedido de penal, Silvio Trucco ignoró la supuesta infracción. El colegiado actuó correctamente, ya que no existió el agarrón solicitado por el volante.
En el desenlace del pleito, el colegiado expulsó erróneamente a Gastón Díaz y la inferioridad numérica afectó de una manera muy notoria al conjunto de Fabián Alegre. Sin embargo, la visita se refugió contra la valla de Javier García y protegió el punto adquirido. De modo que el pitazo final dejó más conforme a Tigre, ya que el elenco de Guillermo Barros Schelotto desperdició la oportunidad de acercarse al único líder del certamen. El domingo tendrá su revancha en La Plata.
