El Gobierno de EEUU anunció ayer importantes medidas que levantan parcialmente desde hoy el bloqueo a Cuba, autorizando el viaje de norteamericanos a la isla con fines específicos y el uso de sus tarjetas de crédito. A su vez se amplían las relaciones comerciales y financieras, además de cuadruplicar el monto autorizado para envío de remesas y flexibilizar las telecomunicaciones.

Las enmiendas a las sanciones contra Cuba comunicadas ayer por el Departamento de Comercio y el Departamento del Tesoro apuntan a acelerar la normalización de las relaciones diplomáticas con ese país, anunciados por el presidente Barack Obama y su par cubano, Raúl Castro, el 17 de diciembre pasado.

Las medidas facilitarán los viajes de los estadounidenses a la isla sin autorización previa del Gobierno siempre y cuando sean con fines específicos, como visita a un familiar, por cuestiones de trabajo o por actividades periodísticas, educativas, deportivas, religiosas y culturales.

Los nuevos pasos para la normalización de las relaciones bilaterales no incluyen los viajes de los estadounidenses con fines turísticos, que siguen estando restringidos. El paquete de medidas aumenta los límites de los envíos de remesas a la isla de 500 a 2.000 dólares por trimestre, autoriza a las instituciones financieras estadounidenses a abrir cuentas en sus contrapartes cubanas con el objetivo de facilitar el proceso de transacciones y permite otras actividades en el área de telecomunicaciones, servicios financieros, bancarios y de comercio.

Las regulaciones enmendadas facilitarán además negocios autorizados para exportadores de EEUU y mejorarán las comunicaciones y el comercio bilateral. A los estadounidenses autorizados a viajar a Cuba se les permitirá importar 400 dólares en bienes desde Cuba, de los cuales no más de 100 dólares pueden consistir en productos de tabaco y alcohol combinados, precisó el Departamento de Tesoro a través de un comunicado. También se facilitará la venta de productos para facilitar la comunicación de los cubanos, como teléfonos móviles, televisores, grabadoras y software. El plan autoriza actividades para promover el crecimiento de pequeñas empresas.