Las 17 mil nuevas casas que construyó el Gobierno en la provincia sumado a la necesidad cada vez más frecuente que han demostrado los sanjuaninos de rodearse de artefactos que brinden un mayor confort al hogar -a la cabeza los aires acondicionados y otros de menos consumo eléctrico como los televisores LCD- a elevado en los últimos 5 años el consumo eléctrico. Esto, a pesar que desde hace dos años el Estado nacional ya repartió más de 367 mil lámparas bajo consumo que fueron cambiadas por los focos comunes -del tipo incandescentes- y que sirvieron para ahorrar prácticamente lo mismo que genera el dique Cuesta del Viento, es decir unos 28 GWh, pero sólo sirvió para apenas amortizar la voracidad del consumo eléctrico residencial.

El "Programa de Uso Racional y Eficiente de la Energía" (Pronuree), que puso en marcha hace dos años el Gobierno nacional y que depende de la Secretaría de Energía, tiene como objetivo estimular el reemplazo de los focos comunes por las lamparas bajo consumo, con las que se ahorra un 76% de energía. En un principio, el plan consistía en entregar dos lámparas por domicilio a cambio de dos incandescentes que se destruían en presencia del propietario de la vivienda, pero últimamente se flexibilizó; y por ejemplo en San Juan se entregan entre 4 y 6 unidades. En los departamentos del Gran San Juan está prácticamente concluida la entrega, y sólo faltan algunas zonas de Chimbas -tarea que se realiza en estas semanas-. Lo que se viene es una embestida más fuerte en los distritos más alejados de la ciudad, donde ya se distribuyó una parte, según explicó el responsable del plan en la provincia Héctor Pérez Silva.

En los dos años que lleva el plan, ya se distribuyeron 367.463 lámparas bajo consumo -los municipios en la primera etapa 152.000 y el gobierno provincial lleva 215.463- en la provincia que representan un ahorro de 26GWh, sin embargo hay un dato que es clave para explicar porque no repercute tanto en el consumo residencial de la provincia: sólo un aire acondicionado mediano en funcionamiento por una hora (de unas 3.000 frigorías) consume más que 60 lámparas bajo consumo encendidas por el mismo tiempo. Es decir, que con 6.124 nuevos aires acondicionados que se sumen en los hogares sanjuaninos se está compensado el ahorro generado por las lámparas bajo consumo, según explicaron desde Energía San Juan. Las estadísticas no son demasiado alentadoras ya que será difícil que el ciudadano común renuncie a aquellos aparatos alimentados principalmente por electricidad y que permiten gozar de un nivel de confort acorde a estos tiempos, sumado a que en los comercios cada vez es más accesible acceder a través de una financiación bastante amplia. "San Juan, por el tipo de clima desértico y caluroso, por los cambios en los métodos constructivos (casas más bajas, ambientes más chicos, paredes más finas y poco aislantes, etc.) y el bajo costo de la energía, sumado a la accesibilidad que el comercio ha impulsado, ha hecho que el aire acondicionado sea elemento que más ha influido en el incremento del consumo en verano y el aumento de la demanda en los momentos pico en San Juan”, dijeron técnicos de la distribuidora de energía local al ser consultados por este diario.

La desventaja que todavía tienen las lámparas bajo consumo es que más allá del plan oficial de recambio que lleva adelante el gobierno, si hay que comprarlas en cualquier casa de electricidad o supermercados, el precio es hasta 10 veces más alto que un foco común, dato que para el bolsillo del sanjuanino no pasa inadvertido a la hora de reemplazar las bombitas, a pesar que esa diferencia dineraria se compensa con el ahorro de energía final que se nota luego en la boleta de luz.