Un informe completo de la publicación Area del Vino señala que a pesar de que el corcho natural ha sido el cierre por excelencia de los vinos, hoy, su uso se limita a productos de alta gama. La tapa a rosca o el tapón sintético para líneas más económicas, surgen como nuevas alternativas. Según los responsables de las empresas corcheras de Argentina, esta migración está dada porque las bodegas necesitan reducir gastos.

En base a datos brindados por la consultora Marketing Research and Technology (MRT), las importaciones de corcho en Argentina cayeron en el último semestre un 4% en volumen. Mientras tanto, la facturación FOB en dólares creció casi un 23%, comparado con el mismo período del año anterior. Los expertos señalan que esta caída en volumen puede estar fuertemente traccionada por el hecho de que el precio por unidad ha aumentado un 27%. . El fenómeno se da principalmente porque el corcho natural proveniente de Portugal incrementó su valor en un 42%.

Por otro lado, se encuentran los tapones llegados de España (segundo origen de las compras argentinas) que cayeron en precio, pasando de U$S 0,17 a U$S 0,15. Incluso, la unidad de corcho proveniente de Portugal es todavía más económica. En promedio, el valor del corcho está en US$ 0,14, mientras que el año pasado estaba en US$ 0,11.

Según los datos de la consultora, durante los primeros seis meses de este año, se importaron más de 59,3 millones de tapones de alcornoque, 4% menos que en el mismo semestre del año anterior, donde fueron 61,5 millones.

En general, los tapones de corcho cotizan en euros (dejando de lado aglomerados económicos que cotizan en dólares) y por la dura competencia, las fábricas europeas han mantenido sus precios en esta moneda.