Niños correteando entre los puestos de artesanías. Jóvenes esperando su turno para domar. Y adultos disfrutando del asado. Este fue el panorama que se vió ayer en el festival tradicionalista que se hizo en el Magrullo para celebrar las Bodas de Plata de la Federación Gaucha Sanjuanina. Y en donde las familias fueron las protagonistas indiscutidas.
Mientras Luis Paredes, locutor oficial de la Federación, anunciaba la entrega de presentes, las esposas o hijos de los presidentes de las agrupaciones que asistieron a la fiesta se agolparon contra el alambrado para retratar el momento. Es que cada agrupación recibió de regalo un poncho sanjuanino para lucir en las fiestas tradicionales. La ceremonia de la entrega fue corta porque había que comenzar con el desfile. Actividad que los gauchos también hicieron en familia. La mayoría cabalgó junto a sus pequeños hijos, ataviados con las pilchas típicas, y bajo la mirada atenta de sus mamás que de tanto en tanto les alcanzaban un vaso de gaseosa por sobre el alambrado para apaciguar el calor.
Terminado el desfile dio el comienzo la doma. Y fue la ocasión para que los jóvenes de diferentes edades demostraran su destreza, alentados por los gauchos veteranos que aplaudieron cada caída como si se tratara de la más grande proeza. En festival contó con la presencia el presidente de la Confederación Gaucha Argentina, Adolfo Caballero.
