La ciudad bonaerense de Escobar sigue conmocionada tras el hallazgo de una joven mamá brutalmente asesinada, pero más aún porque su bebé sobrevivió unas 10 horas a la intemperie recostado sobre su pecho. El caso rápidamente fue relacionado con la historia de la Difunta Correa por las inquietantes similitudes, pese a que en este caso la criatura no estaba amamantando, como relata la leyenda de Deolinda.
Pamela Biosa (21) se llamaba la chica de Escobar, asesinada presuntamente por un exnovio. En el mito y en este asesinato, los bebés se encontraban sobre sus pechos (ver infografía), vivos a pesar de las muertes de sus madres. En ambos casos, las condiciones climáticas bajo la que sobrevivieron sus hijos eran adversas. El niño de Correa bajo un Sol abrasador en el desierto; y el de Pamela, entre la humedad que había dejado la lluvia y apenas 6 grados de temperatura, según explicó a DIARIO DE CUYO Gustavo Fernández Navarro, jefe de Pediatría del hospital Enrique Erill, que atendió al bebé de 8 meses.
Los hallazgos se produjeron en zonas lejanas a sus lugares de residencia. Correa en Vallecito y Biosa en un descampado semirrural. A su vez, las mujeres fueron encontradas por personas que estaban en acción laboral, Deolinda por unos arrieros, y Pamela, según informó a este diario José Laso, director de Niñez de Escobar, por un cartonero.
‘Si bien el bebé no estaba amamantando, sí es un paralelismo importante. Es llamativo que sobreviviera en situaciones extremas. Esa noche hizo mucho frío y el bebé tenía la ropa mojada. Es una criatura con buen peso, tenía todas las vacunas y estaba bien abrigado, quizás eso favoreció su supervivencia. Sólo tenía hipotermia leve’, explicó Fernández Navarro.
‘El parecido con la historia de la Difunta Correa es sorprendente. En este caso, el bebé fue entregado a su padre, David Da Rosa’, apuntó José Laso.
