La plaza Laprida parecía un balneario público exclusivo para mujeres en el medio de la ciudad, ayer. En un intento por refrescarse, pasado el mediodía, las chicas transformaron la fuente en una pileta (actividad que está prohibida) y después se sentaron en ronda bajo los árboles. Más tarde, la que quedó copada fue la Plaza 25 de Mayo, en la que se armó una feria de artesanías. Así, se desarrolló parte del primer día del XVIII Encuentro Nacional de Mujeres, que finalizará mañana.
Las calles estuvieron repletas de colectivos y minibuses que cargaban mujeres durante todo el día. Ellas coparon la ciudad y aprovecharon para descansar en los espacios verdes. Después del inicio del encuentro, que tuvo lugar en el estadio abierto Aldo Cantoni, y con una temperatura que ya había superado los 31 grados, las mujeres salieron a caminar y se detuvieron en la plaza Laprida. Algunas se sentaron alrededor de la fuente y pusieron los pies en el agua, se mojaron la cabeza y hasta aprovecharon para sacarse fotos. Hasta hubo quienes se animaron a pasar el momento sacándose las remeras y quedando sólo en bikini.
Ya por la siesta, la concentración llegó a la plaza principal. Las mujeres armaron gazebos, mesones y algunas carpas y expusieron sus artesanías. La mayoría de las vendedoras integraban agrupaciones del Norte del país y ofrecieron abrigos coloridos y elementos y adornos de barro, cactus y madera.
Horas después, varios centenares de participantes hicieron una marcha céntrica en protesta contra la minería, y pintaron graffitis de protesta en la fachada de varios edificios.
Mientras tanto, se estaban desarrollando los talleres vinculados a distintas temáticas en las 15 escuelas dispuestas para ese fin. Hoy continuará la actividad y por la tarde, alrededor de las 19, todas marcharán por el centro exponiendo sus ideales. El encuentro finalizará mañana por la mañana, con la lectura de las conclusiones.