Profunda, reflexiva y dispuesta al debate. Así es Liliana Herrero, una de las intérpretes folclóricas más destacadas del país, que regresa a San Juan después de algunos años, esta vez para participar de la 3º edición de la Feria de la Cultura Popular, que comienza hoy en Rawson (ver aparte). Desde sus inicios, en los "60, Liliana Herrero propone una forma de interpretación más ligada a la re-composición que a la mera copia fiel de una obra popular en su versión original. Por su impronta, su compromiso musical, muchos la consideran la sucesora de Mercedes Sosa. En su carrera se relacionó con músicos como Fito Páez, quien fue el que la convenció de que dejara la docencia- fue directora de la carrera de Filosofía de la UNR- para dedicarse a cantar, y le produjo su primer disco, en 1987; o como Juan Falú, con quien grabó un disco. Dueña de un estilo propio, que fusiona incluso géneros musicales, Herrero llega con un disco nuevo bajo el brazo, "Este tiempo", que presentará en el marco de la feria, el próximo domingo.
-¿Cómo se define? ¿Es una cantora popular?
-Soy una cantora popular porque me dedico a la música popular. Ahora, si soy popular en el sentido del mercado, eso es otra cosa. No porque yo no lo quiera, sino porque el horizonte sobre el cual está diseñada la música popular, tiene que ver con el mercado y los medios. Yo estoy en el límite de eso, a veces logro tener una pata adentro y a veces logro, y quiero, tener una pata afuera. Son las dos cosas. Me interesa mucho seguir haciendo las cosas, en términos musicales, como yo las quiero hacer y no como me indican las modas.
-¿Qué ocurre en los medios que hace que quiera quedarse afuera?
Hay una estandarización musical que no es lo que a mi me interesa. No me parece que los medios estén presentes en la diversidad musical y poética que hay en este país. Es grave y siempre me pareció grave. Yo creo que con la nueva Ley de Medios y el Instituto Nacional de la Música montón de cosas de éstas que suceden van a dejar de suceder y se va a democratizar un poco más la actividad. Hace falta entender que la música no es un adorno de la vida política y cultural de un país, sino que es un pensamiento sobre el país. Se están dando las condiciones en el país para establecer una polémica que marcaría un nuevo camino para la música.
-¿De eso se trata Este tiempo, como tituló su nuevo disco?
-Yo creo que sí. Yo veo este tiempo muy promisorio, con debates que aún faltan, pero con debates que se han planteado y que son necesarios, y que son el puntapié inicial de otros que vendrán, necesarios para pensar un país más justo, más libre y más feliz. Estamos en otro escenario absolutamente diferente al que tuvimos en el 2001 y del que tuvimos en los 70 y en los 90, que fue para mí la década infame.
-¿Cree que hay una oposición entre música popular y la denominada culta?
-Si hay contraposición, pero es interesante pensar en la relación de la música popular y la posible relación con las vanguardias artísticas. Es un debate necesario para no caer en populismos rápidos ni en elitismos perjudiciales.
¿Hay mucho de su pasión filosófica en su música?
-Como mi formación es filosófica, sí creo que el gesto de interrogar un texto, entendido como una memoria musical, cultural o política, es el mismo, tanto en la música como en la filosofía. Sobre todo para mi que soy intérprete y me dispongo a interrogar una obra, a ver qué voces nuevas tiene para decirme. Este es el diálogo fundamental entre un canto y una obra.
–Muchos creen que es la sucesora de Mercedes Sosa…
-No quisiera que me ubiquen ahí. No lo acepto porque ella amaba a todos los cantores, admiraba a muchísimos. Que a ella le gustaba lo que yo hacia, sin duda. Pero yo no siento que sea su sucesora, porque hay que caminar mucho para ser sucesora de Mercedes Sosa. Lo que creo que yo sí he logrado es ir amasando lentamente un estilo y un modo propio de entender la relación con la música, siendo ella también una intérprete, ella no era compositora, como no lo soy yo.
-¿Qué conoce de los músicos de San Juan?
-Cuyo, me parece magnífico, una escuela de grandes guitarristas. Para mi Buenaventura Luna es fundamental, el armó grupos muy importantes y tiene una obra para revisar seriamente. Me gusta la tonada y le tengo mucho respeto, me parecen de un alto lirismo, con cierta melancolía. Quizás en otro disco pueda grabar algo, porque las tonadas me pueden.
