La vendimia 2016 arrancó demorada para esta temporada por el clima influenciado por el fenómeno de El Niño que trajo una primavera fresca y un estío caluroso y con lluvias que han ocasionado importantes focos de ataque de hongos en toda la región vitivinícola del país.
Como hace ya varios años, el Valle de Zonda es la primera en arrancar con la cosecha al tener una importante superficie de viñedos plantados en un suelo pedregoso y con una importante radiación solar. Todos los años pasadas las fiestas se mueven las gamelas en esta zona rodeada de cerros.
En el 2007 la vendimia arrancó el 4 de enero marcando las primeras uvas del año en el mundo. No sorprenderá que en adelante, y como viene el cambio climático, que las vides comiencen a cosecharse a fines de diciembre, en especial para vinos espumantes. Todo un récord donde uvas de calidad, como el Malbec, están maduras entre 1 a 3 meses antes que otras zonas vitivinícolas.
El Valle de Zonda es una zona privilegiada y de un microclima único. Ubicado en el centro-sur de la provincia de San Juan y emplazado en un valle sinuoso de la Precordillera de los Andes, cuenta con un clima semidesértico con precipitaciones de 100 mm anuales. Su amplitud térmica, acompañada del viento Zonda suave y permanente, hacen que la sanidad del viñedo sea excelente y dé como resultado uvas con gran potencial enológico.
Los viñedos que integran esta diversidad de ‘terroirs’ permiten al enólogo una amplia gama de combinaciones enológicas.
Valle de Zonda fue Declarada en el 2015 por el Instituto Nacional de Vitivinicultura como Identificación Geográfica (IG) en atención a sus atributos para producción de uvas de alta calidad.
La Indicación Geográfica (IG) se define como el nombre que identifica a un producto originario de una región, una localidad o un área de producción delimitada del territorio nacional no mayor que la superficie de una provincia o de una zona interprovincial ya reconocida. La IG sólo se justificará cuando determinada calidad y las características del producto sea atribuible, fundamentalmente, a su origen geográfico. Se puede adherir a este sistema tanto un viñedo como un establecimiento vitivinícola.
El empleo de la Indicación Geográfica (IG) está reservado exclusivamente a los vinos de calidad y las bebidas espirituosas.
El fenómeno de Santa Sylvia
Santa Sylvia es la firma agrícola del grupo Petersen, Thiele y Cruz que produce los vinos marca Xumek, Granaderos y Viuda Negra. Tiene más de 100 hectáreas plantadas, entre Malbec, Cabernet Sauvignon, Merlot, Syrah, Chardonnay, Sauvignon, Pinot y Viognier. Sus uvas se han convertido en las primeras uvas del país cosechadas. Todo un récord si sumamos que sus vinos ganaron ya medallas en certámenes nacionales e internacionales. Sorprendente si se tiene en cuenta que la finca se inició en el 2000 en un lugar donde muchos finqueros de la zona se mostraban incrédulos que la vid creciera con vigor, mucho menos que hubiera cosecha de calidad. Razones no les faltaban. El Sol daba de lleno, las piedras abundaban, todo era un desierto.
Revertir las condiciones desfavorables fue gracias a la aplicación de la moderna tecnología donde el riego por goteo fue clave. Pero el recurso humano fue más que importante para darle forma al proyecto que comanda Ezequiel Eskenazi Storey, presidente de Xumek, quien además busca preservar la fauna y la flora local. Daniel Ekkert, Atilio Rodriguez y Anibal Marengo son pilares del emprendimiento.
Daniel Ekkert es el enólogo de la firma y caminando los cuarteles mirando la madurez de las uvas explicó ‘que estas uvas darán vinos con 14 grados de alcohol con gran tonalidad en los blancos, buena fruta y muy buen color en los tintos. Nosotros estamos colocando los vinos tintos en barricas cuando recién en Mendoza están por empezar a cosechar las uvas blancas para vinos espumantes. A parte de uvas para nuestros vinos, le hemos vendido y vendemos a bodegas importantes como Callia, Graffigna, Peñaflor, Zucardi, Nieto Senetiner, La Guarda y San Juan de la Frontera entre otros’.
Ekkert es un sanjuanino que trabajó en varias bodegas argentinas y que en las últimas temporadas ha trabajado como consultor en la firma Vinauberge, de Nisan, Francia. También recibió asesoramiento de Paul Hobs, el enólogo número uno de Estados Unidos, en exclusivo en Argentina, al proyecto Santa Sylvia SA, en la obtención del ícono ‘Viuda Negra’. Se trata de un vino que se cosecha en forma particular, se fermenta y de inmediato va a barrica. Sale a los 3 años. Hobs se instaló a producir en Luján de Cuyo, y es dueño de ‘Viñas de Cobos’.
Por su parte el Gerente Comercial, Anibal Marengo, explicó que en +un reciente tasting de vinos realizado en Nueva York por Steve Tanzer, el XumeK Reserva Malbec 2010 Edición Limitada, con una partida de 3.000 botellas, obtuvo 89 puntos. Esta serie que está agotada, fue comercializada solamente en Argentina. Esto marca el potencial de la zona+.
Cierro la nota con un breve comentario. En un momento muy difícil de la vitivinicultura nacional hablar de apostar a la calidad suena como algo muy irónico cuando esa calidad no se paga al precio justo que entregue una digna rentabilidad a los productores. Pero no hay duda que sin calidad no habrá nuevos horizontes para la industria del vino. Se viven momentos difíciles. Pero prefiero el optimismo para seguir creyendo. Por eso elegí a un niño para la foto de tapa de esta nota. Allí hay futuro. Allí hay esperanza.