Buenos Aires, 19 de octubre.- El lanzamiento del joven se produjo desde una plataforma situada a 300 metros altura, y su paracaídas no se abrió.
El joven de 27 años amortiguó el impacto ya que el traje de viento que usaba lo protegió lo suficiente como para sobrevivir.
Igualmente, tiene una lesión en la columna vertebral, una fractura de pelvis y una lesión pulmonar, según el informe de los equipos de rescate, que indicaron que estaba consciente y sensible cuando lo sacaron del agua.
El salto formaba parte de un festival de saltadores base, un deporte que implica temerarios saltos en caída libre desde objetos fijos.
