La presidenta Cristina Fernández de Kirchner resolvió ayer relevar de la obligación de guardar secreto al ex espía Antonio Stiusso para que pueda testificar ante la fiscal Viviana Fein, quien lo esperaba ayer para interrogarlo por la muerte del fiscal Alberto Nisman pero el ex agente no se presentó.

El titular de la Secretaría de Inteligencia, Oscar Parrilli, anunció que ‘la Presidenta dio la directiva para relevar a Stiusso de la obligación de guardar secreto desde el ’72 cuando ingreso a la SIDE hasta el 5 de enero 2015, cuando obtuvo su jubilación ordinaria‘.

La Justicia ya tiene en su poder la resolución firmada por Parrilli, que releva al ex agente Antonio Horacio Stiusso, alias ‘Jaime Stiles‘, de 61 años, de todos los secretos de su paso por ese organismo y lo habilita a prestar declaración ante Fein, en el marco de la causa por la muerte de Nisman.

La muerte del fiscal ocurrió el 18 de enero, cinco días después de haber denunciado a la Presidenta por encubrimiento en la causa AMIA y un día antes de tener que presentarse en el Congreso para dar cuenta de esa denuncia. Desde que ocurrió la muerte, el Gobierno puso la mira en Stiusso, director general de Operaciones especiales de la Secretaria de Inteligencia y quien trabajaba mano a mano con el fiscal fallecido aportándole información sobre la causa por la voladura de la mutual judía.

La fiscal Fein había convocado a una declaración testimonial a Stiusso para ayer a las 11, pero Santiago Blanco Bermúdez, el abogado del famoso espía, anunció por radio que su cliente no había recibido ninguna notificación citándolo y que por eso no iba a concurrir a la reunión.

Blanco Bermúdez garantizó que su cliente ‘está a disposición de la Justicia y ni bien se entere se va a presentar a declarar‘. El abogado señaló que no sabía si su cliente había hablado con Nisman el sábado 17, pero aclaró de antemano que Stiusso tiene una flota de teléfonos, por lo que el eventual llamado podría no ser suyo.

Dijo además desconocer si Stiusso cuenta con elementos que puedan servir a la causa, pero aclaró que ‘si los tuviera por supuesto que los va a aportar‘. Para Blanco Bermúdez, el ex agente de inteligencia ‘algo va a poder revelar‘ sobre Nisman ‘por la relación que ha tenido‘ con el fiscal, aunque apuntó que ‘no sé si está en condiciones‘ de referirse a ‘lo qué pasó en los últimos días‘.

Mucha de la expectativa sobre la declaración de Stiusso estaba planteada en términos sobre lo que estaría habilitado a decir: si bien cualquier testigo está obligado a decir verdad, su condición de agente de Inteligencia le imponía guardar secreto sobre su accionar.

En ese marco, tras la fallida citación a Stiusso, Parrilli informó que por decisión presidencial se resolvió relevar a Stiusso de la obligación de guardar secreto con el fin de que testifique ante Fein. Tras recordar que el espía ya no pertenece a la Secretaría que comanda, Parrilli advirtió que ‘lo de Stiusso tiene que ver no solamente con políticos, tiene que ver con empresarios, con medios de comunicación‘. ‘Por eso la Presidenta quiere que se cuente todo‘, advirtió el funcionario tras participar de una reunión de la Comisión Bicameral de Fiscalización de Organismos y Actividades de Inteligencia.

La citación a Stiusso, jubilado el pasado 5 de enero y quien ya no tiene vínculos con la agencia de inteligencia estatal, se produjo luego de que el análisis de un teléfono Nextel de Nisman revelara que poco antes de su muerte había mantenido un conversación con un teléfono a nombre del espía, principal proveedor de información del fiscal en la causa AMIA. El defensor de Stiusso puso en duda que las comunicaciones detectadas en el celular de Nisman fueran con el teléfono del ex espía al asegurar que ‘tenía un batallón de teléfonos a su nombre‘. Fuentes: Télam y DyN