Un nene de 10 años fue rescatado ayer madrugada por efectivos de la Policía Federal después de permanecer secuestrado durante 48 horas en un hotel del barrio porteño de Constitución, donde fue hallado sedado y atado de pies y manos a una cama, según Télam. Uno de los captores es la amiga de la familia del chico.
La víctima es hijo de una familia paraguaya que vive en la villa Zavaleta del barrio porteño de Barracas. Su madre tiene una parrilla y panchería en la que “le va muy bien. Incluso, la mujer solía comentar en público que recaudaba entre 1.000 y 1.500 pesos por día, lo que seguramente hizo que los secuestradores eligieran a su hijo como blanco del secuestro”, reveló un investigador.
El nene salió a comprar el lunes a las 20 y ahí se encontró con una amiga de su mamá, también de nacionalidad paraguaya, quien se lo llevó mediante engaños hasta el hotel Valencia en Constitución. Ahí sedaron al niño y lo maniataron en una cama, mientras que realizaron 30 llamadas extorsivas exigiendo un rescate de 200.000 pesos. La familia logró reunir $150.000 e hizo la entrega ayer en la madrugada, pero los federales detuvieron a un travesti que intentó cobrar el rescate. Los llamados continuaron y se pactó nuevamente el pago del rescate, ocasión en que detuvieron a la mujer paraguaya (la amiga de la familia), quien finalmente confesó donde tenían cautivo al niño. Por el caso hay dos personas prófugas.