Costaría mucho trabajo imaginar la vida cotidiana sin limón, y justamente por su presencia discreta pero constante resulta imprescindible en el arte culinario. Se usa el limón en la cocina para mil cosas: evitar que se pongan negras algunas hortalizas, aliñar ensaladas o dar a ciertas comidas ese sabor tan especial. Sin embargo las cualidades del limón no sólo se refieren a la comida. Dotado de vitamina C y calcio, puede retardar el envejecimiento de la piel y contribuir a una buena circulación sanguínea; por eso se lo considera uno de los frutos con más cualidades a favor y con un papel gastronómico fundamental.
En realidad hay una extensa lista de comidas en las que se incluye al limón como ingrediente, basado en su acidez. Todo pescado combinado con limón adquiere un sabor inigualable, y si con anticipación se los macera (unta) con el jugo de ese fruto mucho mejor, ya que la carne se torna más firme. Por otro lado, cuando se prepara un asado ya sea de carne o pollo, preparar el chimichurri con limón es más que recomendable.
En cuanto a la repostería el limón también tiene lo suyo. Unas gotitas de su jugo en almíbar impiden que éste se cristalice, y en las claras batidas a punto nieve, que se corten. Así mismo, este fruto es necesario para la conservación de los alimentos frizados, ya que unas pocas gotas impiden que las verduras, carnes de aves y pescados se descompongan con facilidad por las bajas temperaturas.
Distintos usos
Empanada árabe: Consiste en carne de cordero molida sumergida, por un día, en jugo de limón. Luego se le agrega tomate, cebolla y condimentos regionales. Por supuesto que a falta de cordero en San Juan se lo hace con carne vacuna.
Lemon Cake (pastel del limón): Es uno de los postres con más aceptación entre los habitantes de Estados Unidos. Consiste en una masa base de crema de limón cubierta co un merengue preparado con huevo, azúcar y ralladura del mismo fruto.
En bebidas: limón es sinónimo de refresco; pocas cosas calman la sed como una limonada. Así, este cítrico es parte importantísima de algunos de los más deliciosos cócteles. esa acidez refrescante lo hace insustituible. Desde el famoso "Cuba libre" hasta la sangría o un simple té helado se pueden preparar y combinar con el sabor inconfundible de este cítrico.
Cuba libre
Ingredientes: una medida de ron, una cucharada de jugo de limón, una parte de la cáscara de esta fruta, hielo granizado y Coca Cola.
Preparación: colocar en un baso de wisky el hielo, el ron y el jugo de limón. Llenar el vaso con cola bien helada. Mezclar y servir en el mismo vaso adornado con tiritas de limón.
Sangría
Ingredientes: jugo de un limón, una naranja, 3 ó 4 cucharadas de azúcar y un litro de vino tinto.
Preparación: poner en una jarra el jugo de limón, el azúcar, la naranja cortada en rodajas y el vino. Revolver y llevar a la heladera. Servir bien fría.
Té helado
Ingredientes: 12 cucharaditas de té, un litro de agua hirviendo, gajitos de limón, azúcar a gusto y hielo granizado.
Preparación: poner el té en una tetera y agregar un poco de agua hirviendo. Dejar reposar un momento, verter el resto del agua y dejar enfriar. Colar y colocar en vasos con el hielo granizado. Agregar un gajito de limón por vaso y endulzar a gusto.
