Con chiche nuevo, pero sin recursos. Este la situación por la que atraviesa el Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Chimbas que finalmente, luego de tres años de espera, recibió la autobomba que les donaron sus colegas de Escocia en reconocimiento a la ayuda que prestaron en Paraguay para sofocar uno de los más grandes incendios forestales. El vehículo llegó en perfectas condiciones, pero aún así no puede salir a cumplir con su misión. El destacamento cuenta con muy pocos recursos y, nuevamente salió a la calle a pedir la colaboración de la gente para, por lo menos, poder comprar combustible.
Mecha ya es una integrante más del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Chimbas. Se trata de la autobomba donada en el 2007 por bomberos escoceses, y que en julio del año pasado llegó al puerto de Buenos Aires. Después de seis meses de espera, por trámites de aduana y falta de presupuesto para su traslado, arribó a destino para sumarse a las dos autobombas que tiene este cuartel. "El Gobierno de la provincia nos dio un subsidio para pagar el flete, sino todavía estaría en Buenos Aires", contó Sergio Cuello, el presidente de este destacamento que bautizó Mecha al nuevo vehículo en homenaje a su mamá Mercedes.
Cuello contó que la autobomba llegó en excelentes condiciones, y que no hubo que hacerle reparaciones ni mantenimiento. Y que por eso se lamenta por no poderla hacerla andar cada vez que recibe un llamado de auxilio. Dijo que los bomberos voluntarios no cuentan con subsidios de ningún tipo y que sobreviven a pulmón, con lo que cada uno puede aportar o conseguir en donación. "Sólo una vez al año los destacamentos voluntarios que están legalmente constituidos reciben del Ministerio del Interior un subsidio de 20 mil pesos para equipamiento, que no alcanza para reparar las unidades que se rompen, reponer equipos, o comprar combustible, y nos vemos obligados a recurrir a la solidaridad de la gente", sostuvo.
El Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Chimbas ha puesto nuevamente en marcha una campaña de recolección de fondos para la compra de combustible, como lo ha hecho a lo largo de sus 11 años de funcionamiento. Todas las tardes, un par de bomberos reparte calcomanías a la entrada del Hiper Libertad, pidiendo a cambio una colaboración a voluntad.
Sergio Cuello sostuvo que gracias a la ayuda a la comunidad pueden seguir trabajando y atendiendo a los 8 pedidos de asistencia que, en promedio, reciben por semana. Y, además, colaborando con otros destacamentos que, como el suyo, subsisten con recursos propios. Contó que prestarán una de las tres autobombas a un recientemente Cuerpo de Bomberos fundado en Albardón.
