Los adultos volvieron a sentarse en los bancos frente al lago y los chicos se apoyaron sobre las rejas recién pintadas para mirar. El estanque ya tiene agua y otra vez se convirtió en el mayor atractivo del Parque de Mayo, ya que comenzó a llenarse tras dos meses de obras. De esta manera concluyó la histórica limpieza del lago, que comenzó el 15 de septiembre pasado y cuyo resultado es un cambio radical. Y es que, por ejemplo, por primera vez en 12 años se ve agua transparente, tal como pasó cuando se reinauguró el paseo en 1998.
El agregado de agua comenzó el sábado pasado y llegar al borde tardará 10 días más, informó Roberto García, titular del Obrador de la Dirección de Arquitectura, que tuvo a cargo la limpieza. El proceso será lento porque además del enorme volumen de líquido requerido, cantidad que no pudo ser especificada por las autoridades, el lago usa agua de un surgente y la bomba que la extrae debe detenerse periódicamente, para evitar un sobrecalentamiento.
Además de que el agua está limpia, el estanque por primera vez luce paredes pintadas (del mismo color celeste que las piletas de clubes o casas), la isla fue recubierta con piedras de cuarzo color rosado y ahora habrá cuatro géisers que lanzarán grandes chorros de agua, no sólo para hacer más atractivo el paseo, sino especialmente para oxigenar el líquido. Si bien ya había dos de estos géisers, uno estaba roto desde hacía más de 10 años y al otro no lo hacían funcionar porque el movimiento del agua generaba un olor insoportable.
Por otro lado, se mantiene la incógnita sobre los animales del lago. Lo concreto es que el lago volverá a tener peces y aves, pero no en la misma cantidad que antes. Entre patos, gansos y una oca, sacaron unos 140 que permanecen en la Escuela Agrotécnica de Sarmiento, mientras que extrajeron unos 2.000 peces que fueron trasladados al Instituto Hidrobiológico de Rivadavia.
"La semana que viene vamos a ir a la Escuela Agrotécnica y haremos una selección de las aves, ya que queremos los ejemplares más sanos y un número parejo de patos y gansos, además de la oca. Pero no trasladaremos todas las aves porque son muchas. Sobre los peces, nos reuniremos con las autoridades del Hidrobiológico para determinar si los traemos de vuelta al lago o si hacemos una nueva siembra", adelantó García.
Por su parte, Raúl Tello, subdirector de Medio Ambiente, organismo que cobija al Instituto Hidrobiológico, adelantó que la intención es regresar el cardumen. "El mantenimiento del Parque depende de Arquitectura y la decisión final sobre los peces será de ellos. Pero la idea es devolverlos, ya que nuestra función es la siembra de nuevos ejemplares y no el cuidado de carpas", indicó.
