Con los guardapolvos súper blancos, los zapatos brillantes y el pelo peinado a la perfección, los alumnos de primer grado fueron los más entusiasmados y felices con el comienzo de clases que fue ayer. DIARIO DE CUYO visitó escuelas del Gran San Juan y los chicos se mostraron muy alegres por el comienzo del ciclo.
Fue un día de muchas emociones. Al principio hubo algunos que no querían soltarle la mano a las mamás. Sin embargo, el reencuentro con compañeritos del jardín o las presentaciones con nuevos chicos hizo que la mayoría perdiera la vergüenza y el miedo a lo nuevo. Así fue que después del silencio llegaron los gritos y las risas que demostraron la alegría por el primer día en la escuela.
La mayoría fue puntual. ’Mi hijo casi no durmió, le ganó la ansiedad de ponerse el guardapolvo nuevo y de empezar primer grado’, dijo Rosana Torres, mamá de un alumno de la Escuela Sarmiento, de Capital. Junto a ella otros papás dijeron que a varios les pasó lo mismo y que en ningún momento los chicos se negaron a ir a la escuela. ’Yo quería empezar las clases. Me gusta mucho la escuela’, dijo Pilar Gómez de la misma institución.
En muchas escuelas, la mañana comenzó de manera similar. A la hora de ingreso se llevó a cabo el acto de inicio de clases y luego la actividad siguió normalmente. Los chicos hicieron tareas, ocuparon sus útiles nuevos y disfrutaron de cada uno de los recreos. Así fue que los más chiquitos vivieron una nueva experiencia y los más grandes el reencuentro con los amigos de la escuela.
Al igual que los niños, los papás también mostraron su alegría y hasta dijeron estar nerviosos. Si hasta hubo algunos que no se movieron de la puerta de las aulas por las dudas que los niños los extrañaran. Además, como si fuera poco, hubo escuelas que siguieron con las inscripciones abiertas por lo que los pasillos se volvieron un caos. Largas filas de padres que se mezclaron con los chicos que corrieron, jugaron a la pelota y gritaron. Estas fueron algunas de las postales que dejó el primer día de clases.
