Los dinosaurios encontrados en estas tierras están de gira. Por estos días, sus réplicas no sólo llegaron a tierras niponas (dónde se armó una super muestra que inauguraron con bombos y platillos el viernes pasado, el gobernador y el secretario de Turismo, ante la vista de miles de japoneses) sino que desembarcaron en el Museo Bernardino Rivadavia en Parque Centenario (Buenos Aires) para afincarse allí en estas vacaciones y por un tiempo más. Como si fuera poco también están en Alemania. De hecho, esta semana que pasó se abrió en el Senckenberg Research Institute and Natural History Museum de Frankfurt una exposición donde los primitivos animales que poblaron San Juan son los verdaderos protagonistas.

En esta última exposición un 30 por ciento del material que se muestra pertenece al Museo de Ciencias Naturales de la provincia, mientras que el resto de las 22 réplicas de huevos, embriones y huesos se dividen su titularidad entre museos de 6 provincias ricas en tesoros paleontológicos, entre los que están el Museo Argentino de Ciencias Naturales Bernardino Rivadavia de Buenos Aires, el de Ciencias Naturales de La Plata, el Paleontológico Egidio Feruglio de Trelew (provincia de Chubut), el Carmen Funes de Plaza Huincul (Neuquén), el Municipal de Lamarque (Río Negro) y el Museo de Villa El Chocón (provincia de Neuquén).

"A Alemania, San Juan no sólo llevó la mayor cantidad de piezas sino que además el doctor Oscar Alcober -director del museo de Ciencias Naturales local- se desempeñó como curador de esta muestra que reunió las réplicas más importantes que existen en el país para convertirse en la exposición que lleva por nombre Dinosaurios de Argentina", indicaron desde la oficina de prensa del Instituto y Museo de Ciencias Naturales de la Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de la UNSJ.

La muestra hace un tiempo ya que está dando vueltas por Alemania: salió en marzo del 2009 y tras superar un inconveniente (ver Una piedra en el camino) pasó por la ciudad sureña de Rosenheim (dónde en los primeros seis días la apreciaron más de 10.000 personas), por la ciudad de Bonn y ahora en Frankfurt. Realmente a cada paso, lo exhibido logró impresionar al público, sobre todo al enterarse que este material era la primera vez que salía del país. Hoy por hoy y con el monumental traslado de piezas paleontológicas a Japón desde San Juan, la cuestión ha cambiado un poco aunque no ha perdido interés. Es que en opinión de los expertos, "Argentina tiene mucho que mostrar a nivel de dinosaurios y San Juan aporta lo suyo", dicen.

Según detallan desde la oficina de prensa del Conicet -el organismo que junto a la Cancillería argentina facilitaron el envío a Alemania- todas las piezas fueron buscadas, halladas y estudiadas por argentinos, mientras que en el caso particular de las de San Juan fueron replicadas por un equipo especialmente formado en la UNSJ en base a resina plástica y fibra de vidrio imitando a los esqueletos originales encontrados en Ischigualasto. Hay dinosaurios locales que fueron realizados tres veces: uno para exponer en Japón, otro para llevar a Buenos Aires y un tercero para Alemania (algunos de ellos son los que pudieron verse en el "Titanes de Ischigualasto" que se montó el año pasado en el Auditorio Juan Victoria). Entre todas las piezas expuestas en esta muestra se logró reconstruir los habitantes bípedos y cuadrúpedos de los períodos Triásico, Jurásico y Cretácico de la era Mesozoica. Allí están desde los primeros fósiles conocidos, de 220 millones de años, hasta los más cercanos en el tiempo, de 65 millones de años.

Los expertos aseguran que se trata de la mayor exhibición de fósiles argentinos. Está integrada por 22 esqueletos completos (entre originales y réplicas) de las especies que habitaron el territorio del país, e incluye huevos, embriones y piezas óseas individuales. Demoró más de cuatro años en montarse ya que requirió un duro trabajo conjunto de siete museos de ciencias naturales del país.

Se sabe que la muestra seguirá en Alemania al menos hasta octubre de este año. De todos modos no es la fecha del regreso ya que lo más probable es que los esqueletos y las corporizaciones tengan más espacio en otros escenarios europeos, los que todavía no están definidos. Hay muchas ciudades que quieren tener este privilegio para los curiosos.

Una piedra en el camino

Abrir la muestra en Alemania no fue algo sencillo. Basta hacer memoria hasta mediados del 2009 cuando salió a la luz que los fósiles en cuestión quedaron envueltos en una pelea judicial con acreedores del Estado, después que un grupo de bonistas alemanes en mora desde el 2001 le pidieran a la Justicia de su país que trabe un embargo sobre esa colección a modo de reclamo del pago de deudas que ascendían a unos 20 mil millones de dólares.

Si bien no habían antecedentes de un pedido semejante en el mundo, la cuestión pudo destrabarse cuando se demostró por un lado que las piezas paleontológicas exhibidas en Alemania eran de propiedad de museos provinciales y no pertenecían al Estado Nacional por lo tanto no podían cobrarse de allí. Otro justificativo a favor de sostener en pie la apertura de la muestra fue que se trataba de piezas de "valor cultural" y no económico.

Así, los "gigantes Argentinos" superaron el inconveniente y pudieron cautivar a todos los que visitaron los predios. Al día de hoy, siguen el recorrido acordado e inclusive se llevan todos los aplausos por estos días.