Las continuas jornadas de intenso frío en la provincia empiezan a mostrar las primeras caras largas dentro del sector productivo local. Los empresarios olivícolas ya tienen un primer pronóstico y no es para nada alentador: las plantaciones de la zona Este de la provincia ya muestran signos de deterioro a causa de las bajas temperaturas, casi tan graves como la del 2007 donde las pérdidas por las heladas alcanzaron el 70% en esa misma zona. Desde el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuario (INTA) informaron que las horas de frío acumuladas en lo que va del año llegan a las 1.042 (son las que están por debajo de los 7º), superando en tres horas a las de ese año. Pero lo más dañino, son los picos de temperaturas bajo cero, que por cierto este invierno ya arrojó varios. Las plantas más perjudicadas son las variedades de aceitunas conserveras.
"La situación que tenemos los olivicultores en este momento es para preocuparse y mucho. Estimo que en unos 20 días ya podremos saber cuál es el porcentaje de daño en las plantas chicas y a fines de septiembre en las otras, pero todo indica que se viene otra temporada con mucha merma y rindes pobrísimos. Realmente es otro golpe bajo que nos complica", dijo en forma tajante Antonio Olivares. La fuertes heladas matan a la yema y merman la floración, por ende es menos la cantidad de aceitunas que producirá la planta de olivo.
Las fincas que ya advierten inconvenientes son las ubicadas en los departamentos de Caucete, San Martín, 9 de Julio, 25 de Mayo y Sarmiento, y principalmente aquellas que tienen plantas más jóvenes, porque cuanto más pequeño es el ejemplar menos resiste los embates del frío y más aún si no tuvo los suficientes nutrientes desde su inicio.
Carlos Pasquet, tradicional productor olivícola de la provincia, explicó que "es algo muy parecido a lo que nos pasó en el 2007 que fue un año terrible, pero esta vez hay diferencias, porque este año hemos tenido niveles muy altos de humedad y algunas nevadas, lo cual en un principio atemperaría ciertos daños en las plantas. Recuerdo que en ese año hubo plantas heladas hasta la cruz -donde el tronco se divide en ramas- y tuvimos zonas donde no servía prácticamente nada de nada, fue un desastre para muchos colegas que quedaron en la lona", graficó. Otro hombre del sector que expresó su preocupación por las consecuencias del crudo invierno sanjuanino es Daniel Dates: "Cuando hace mucho frío y por periodos largos, hay problemas en las plantas seguro. Cuando la planta se hiela el olivo deja de florecer, porque se queman las yemas florales -que son las que más sufren- y después las yemas de hojas. Espero que cuando hagamos el relevamiento no tengamos tanto daño como a priori uno supone por lo que sabe y los años que lleva en ésto", precisó el productor.
En el territorio provincial existen alrededor de 18.600 hectáreas de olivos, de las cuales unas 3.000 son de variedades destinadas a conservas como Manzanilla, que es muy sensible al frío. El resto se reparte en variedades netamente aceiteras como la Arbequina o mixtas como Changlot que son más resistentes a las bajas temperaturas.
En la temporada 2009/2010, hubo una importante merma que decantó en cosechas muy pobres tanto de aceitunas conserveras como de las aceiteras, reflejada en volúmenes que fueron entre un 50 y 60% menores que la anterior campaña, que no había sido de las mejores para el sector. Si bien sirvió para elevar el precio y muchos empresarios tuvieron su "veranito", al mismo tiempo no ayudó para abastecer toda la demanda.