La empresa canadiense Research In Motion (RIM) se hizo mundialmente conocida de la mano de sus populares teléfonos BlackBerry, pero con los años y el avance la competencia fue perdiendo terreno. Por eso, volvió al mercado presentando su esperado nuevo sistema operativo, BB10, que introdujo de la mano de dos nuevos ‘smartphones‘, el Z10 y el Q10.
De paso, RIM decidió cambiar su nombre a BlackBerry para lograr una completa identificación con sus nuevos productos.
El Z10 deja atrás el tradicional teclado de las BlackBerry con una pantalla táctil de 4,2 pulgadas, mientras que el Q10 mantiene ese teclado pero incluye también una pantalla táctil más reducida en lo que el consejero delegado de la empresa, Thorsten Heins, calificó como su primer teléfono inteligente con teclas.
El Z10 llegará en marzo a EEUU, al tiempo que estará en las tiendas de Canadá el 5 de febrero por un precio de 149 dólares por un contrato de tres años, y desde hoy se podrá comprar ya en el Reino Unido.
Algunas de las funciones del nuevo sistema operativo BB10, como ‘Balance‘, permite tener dos perfiles diferentes en un mismo aparato para separar el uso profesional del personal.
Heins también hizo énfasis en la nueva función BlackBerry Hub, que aúna en un mismo lugar todos los mensajes de texto, instantáneos, correos electrónicos y novedades en las redes sociales para poder encontrar de un solo vistazo toda la interacción social del usuario.
Durante la presentación, Heins introdujo también el nuevo sistema de videoconferencia de su sistema de mensajería instantánea, BBM, y realizó una prueba en directo con otro miembro de la compañía en Londres, que además pudo compartir su pantalla gracias al nuevo sistema operativo.
Las demostraciones se realizaron con el Z10, que, si bien no es el primer terminal de BlackBerry sin teclado, sí que es el primero en no contar con un botón de inicio, lo que, según Heins, demuestra que el teléfono permite ‘realizar realmente varias tareas a la vez‘, sin tener que volver a la pantalla de inicio constantemente. También destacó el teclado virtual, que va sugiriendo palabras mientras se escribe, que se pueden incorporar al texto al arrastrarlas hacia arriba, lo que calificó como ‘escribir sin tener que teclear‘.