San Juan, 25 de marzo.- Más de 60 perros parecen ser los dueños absolutos del paraje Difunta Correa, en Vallecito. Sin embargo, las quejas entre los fieles se multiplican y la solución parece estar lejos de llegar.
Es que los perros, en su mayoría abandonados por sus propietarios, vagan por el lugar durante el día y al llegar la noche descansan sobre el santuario dificultando el acceso del público.
“La verdad es que no son animales malos o peligrosos, pero si hay muchos”, reconoció el administrador del lugar, Daniel Rojas, ante el miedo expresado por algunos visitantes.
Rojas aseguró que se encarga de los cuidados de los perros y hasta la esterilización de varios de ellos, pero manifestó que no existe, hasta el momento, una solución definitiva para la sobrepoblación canina. “En septiembre del 2011, gracias a una veterinaria que debía cumplir una promesa, logramos castrar unos 30 animales. De 20 se hizo cargo ella y del resto yo, pero cada vez hay más animales y no tenemos como solucionarlo”, relató.
El administrador culpó a la gente por la gran cantidad de perros abandonados y pidió un cambio de actitud “para hacer de la Difunta un lugar de todos”. “No existe un lugar en la provincia donde llevar los animales abandonados, tampoco podemos hacernos cargo de los costos para castrar a todos y aunque lo hiciéramos la gente continuaría tirando a los perros. Hace falta la toma de conciencia, sin eso todos los trabajos son en vano”, agregó.
