‘La risa cura y nosotros queremos curar con risas’, resume la idea Cristina Villavicencio (20). Se trata de un grupo de jóvenes que trabaja para crear la rama local de Payamédicos, una agrupación que ya tiene antecedentes en otras partes del país y que consiste en disfrazarse de payasos para acompañar a pacientes internados en hospitales, bajo la premisa que afirma que el humor y la risa contribuyen a la salud emocional del enfermo.

Los payamédicos se hicieron conocidos por el famoso médico norteamericano Patch Adams, cuya vida fue llevada al cine (la protagonizó Robin Williams). El grupo de sanjuaninos que busca imitarlo organizó una charla el 26 de noviembre con los pioneros de Payamédicos en Argentina. La intención es que además capaciten a 25 personas (y dejar 2 formadores) para poder fundar la rama sanjuanina de la agrupación.

‘La idea es que en diciembre ya podamos estar dando nuestra mano en pacientes internados’, dijo Noelia Villavicencio (36), psicóloga y gestora de la iniciativa.

Desde el Ministerio de Salud Pública dijeron que ven con interés la propuesta, pero que oficialmente será analizada la semana que viene en el Consejo Técnico y con la presencia del ministro Oscar Balverdi. ‘Tuve una reunión con este grupo y la iniciativa es innovadora e interesante. A nivel mundial Patch Adams fue un precursor en esto y la verdad que yo desconocía que en Argentina se hiciera algo similar’, dijo Enzo González Iaisa, secretario técnico del Ministerio de Salud Pública.

‘Si Payamédicos, una vez formado, tiene nuestro apoyo, es posible que hagamos una experiencia piloto en un hospital, especialmente entre los pacientes oncológicos’, adelantó el funcionario.

En Argentina, Payamédicos se formó como una ONG sin fines de lucro en 2002, cuando dos médicos de hospitales públicos bonaerenses decidieron usar la técnica de clown (payaso) para ayudar a sus pacientes. La iniciativa se extendió y ahora hay grupos en 10 provincias.

‘Yo buscaba hacer algo más allá de mi profesión y los voluntariados que hay en Salud no me convencían. Cuando me enteré de la existencia de Payamédicos, me contacté con las autoridades de Buenos Aires y con la ayuda de ellos empezamos a gestar el grupo sanjuanino. Ya llevamos 3 reuniones y en la última tuvimos una videoconferencia con las autoridades de la ONG, que nos dieron pautas de trabajo’, dijo Noelia.

Entre los jóvenes hay distintos profesionales, desde psicólogos, médicos recién recibidos a ingenieros, mientras que la mayoría son estudiantes de Medicina, Nutrición, acompañantes terapéuticos y artistas callejeros. ‘Me detectaron leucemia a los 11 años y cuando me trataba en el Hospital Italiano, en Buenos Aires, venían los payamédicos a visitarme. Me hicieron muy bien y siempre les estuve agradecida, así que quiero devolver esa mano’, contó Carla Brito (22).

‘Si bien hacemos malabares, magia y humor, nuestro trabajo está adaptado a los cuadros patológicos y al entorno del hospital, por eso hacemos un seguimiento del paciente. No somos una medicina alternativa, sino un complemento’, contó Violeta Pérez Bromberg, médica y vicepresidente de Payamédicos Argentina.