El seleccionado argentino de rugby, Los Pumas, goleó ayer a Namibia por 64-19 en el estadio de Leicester City FC, en el cierre de la fase clasificatoria, y jugará en Cuartos de final contra Irlanda. Con el partido ante los africanos, Argentina concluyó la etapa clasificatoria del Grupo C de la Copa del Mundo con tres victorias y tan solo una caída. Namibia no fue rival en ningún momento para el equipo alternativo que puso en campo Daniel Hourcade que intentó jugar siempre desde todos lados y si no marcó más tries fue por varios errores de manejo y, además, porque algunos jugadores buscaron más el lucimiento individual que el colectivo.
Difícil elegir figuras en un partido tan desparejo, pero a la hora de evaluar fueron muy buenas la tareas de Matías Moroni, Pablo Matera y Julián Montoya, por sólo citar a algunos de los protagonistas del representativo nacional.
Cinco conquistas coronaron una muy buena primera mitad, arrancando por una de Juan Martín Hernández, quien fue habilitado por Matías Moroni en una acción que dio inicio en campo albiceleste y desnudó la falta de tackle del conjunto africano. Luego fue Moroni, de buena labor, quien quebró la endeble defensa rival y se coló hasta el ingoal. En el medio llegó el primer try namibio, marcado por Johan Tromp, tras una desconcentración albiceleste. La conquista de Horacio Agulla, que nació en una pelota recuperada, la de Facundo Isa, tras una típica jugada de line y maul, y la de Lucas Noguera Paz, tras otra gruesa falla defensiva adversaria, decoraron un primer parcial que se cerró con una clara ventaja de 36-7.
El segundo tiempo fue muy desordenado. Los Pumas intentaron lujos que a veces salieron y a veces no. Marcaron cuatro tries -en total fueron nueve- y terminaron siendo el equipo más goleador de la fase inicial, pero a veces se excedieron con los “pases mágicos”. Sólo hubo que esperar el silbato final del francés Pascal Gauzere, que llegó tras el intento fallido de conversión del pilar namibio Johnny Redelinghuys, quien se despidió de su seleccionado. Terminó pareciendo un partido de esos con los que los clubes festejan el final de temporada, no uno de un Mundial. Pero, Los Pumas ganaron bien, volvieron a mostrar un notable poderío ofensivo.
