La Secretaría de Medio Ambiente es responsable de velar por la reducción de los niveles de contaminación proveniente de los residuos domiciliarios y de la actividad agroindustrial en zonas rurales de nuestra provincia, aunque son los municipios los responsables de recolectar la basura y darle el tratamiento correspondiente, como se realiza en la planta de tecnologías ambientales ubicada en Rivadavia.
Así como cada comuna dispone de equipos y personal para recolectar los residuos en los centros urbanos, es necesario que también se realice este trabajo en las áreas rurales, aconsejando a los pobladores que no entierren los desperdicios en el lugar, ni que los quemen en predios baldíos y mucho menos que los arrojen en la orilla de las calles, debido al alto riesgo de la contaminación ambiental que generan estos basurales.
Actualmente, Medio Ambiente está colaborando con varios municipios en tareas de saneamiento ambiental con el objeto de ir mejorando sectores altamente contaminados con basura y hasta tanto se ejecuten los proyectos de las distintas plantas de tratamiento en la provincia. Si bien hasta ahora el único procesamiento se hace en Rivadavia, se espera para el próximo año contar con otras plantas similares en departamentos cercanos como Caucete, 25 de Mayo, San Martín y 9 de Julio; en tanto se prevé igual tratamiento en Iglesia, Calingasta, Valle Fértil y Jáchal.
El destino final de los residuos producto de la aplicación de agroquímicos está contemplado en la Ley Nro. 6.744, sobre el "uso de fitosanitarios, fertilizantes, abonos, enmiendas, inoculantes y otros productos de saneamiento ambiental". Esta legislación, en plena vigencia, se refiere a la utilización de los productos como también al destino que se le dará a los desechos para evitar contaminación o cualquier otro accidente, estableciendo las sanciones correspondientes para quien no cumpla con la norma.
Ante la proximidad de un nuevo período de gobierno en los municipios, es necesario que las autoridades comunales consideren la creación de un sistema de recolección de los residuos de las zonas rurales. Esto último con el convencimiento de que manteniendo la limpieza en el área rural se contribuye con el ambiente y con la calidad de los productos frutihortícolas que allí se cultivan.