Las paredes de las dos viejas capillas están repletas de pequeñas perforaciones. Son las huellas que dejaron más 7.000 placas pegadas durante décadas por los fieles. Y retirarlas, una por una, fue el primer paso para encarar una de las obras más importantes que harán en la Difunta Correa. Es que esas dos capillas serán demolidas y en su lugar construirán una gran estructura para alojar lo que la creencia considera que son los restos de Deolinda, en una acción que buscará revalorizar un sitio de intensa devoción.
El movimiento servirá, además, para que se devele otro misterio que guarda el paraje, ya que mucha gente descree que realmente haya un ataúd bajo el sepulcro de la llamada Capilla 1, en el supuestamente se depositaron el cuerpo de Deolinda.
De acuerdo a la creencia, en la llamada Capilla 1 colocaron el ataúd de la Difunta Correa luego de trasladarlos de una piecita que estaba junto a la gruta, en lo alto de la lomada, ya hace varias décadas. Encima construyeron una estructura de cemento, con la imagen de Deolinda mirando al cielo y amamantando a su hijo. Ese sepulcro será también destruido para reubicarlo en forma perpendicular a su posición actual, adelantó Miguel Ganzitano, encargado del predio. Cuando hagan eso, para muchos quedará develado el misterio sobre si realmente allí hay o no un ataúd.
Lo que demolerán serán la Capilla 1 y la que está al lado. La nueva estructura tendrá 55 m2, dos cúpulas e interior revestido en mármol y porcelanato. Según informó Daniel Rojas, administrador del lugar, decidieron encarar la obra para revalorizar un sitio de fuerte devoción. ‘Los restos de la Difunta están un sitio que la verdad no estaba lindo y es muy chico para la cantidad de gente que recibe. Estimamos que la nueva capilla estará lista a fines de febrero’, dijo. Por su parte, la remoción de placas provocó malestar en algunos devotos. ‘Entendemos a la gente, pero no había otra opción. Todas las placas ya empezaron a ser reubicadas en distintas paredes’, agregó Rojas.
Por otro lado, una obra que pronto será inaugurada es la ampliación de la calle principal, que de 7m pasó a 9m de ancho, y de las veredas en el sector de puestos gastronómicos. Allí ya no se podrá estacionar y creen que solucionarán los problemas de circulación vehicular.