Es considerado el maestro del cajón peruano, instrumento del cual es Embajador Cultural, nombrado por el gobierno de Perú. Pero además, el compositor, intérprete e investigador tiene en su haber el premio más importante de la música: un Grammy Latino que recibió en el 2002 en la categoría Mejor álbum folklórico por su obra de música Criolla y Afro Perú junto a Susana Baca. Con ese bagaje de reconocimientos y con su mochila cargada de ritmos (que aporta a géneros diversos como el jazz, la electrónica o el tango); Juan Medrano Cotito llega a San Juan -junto a Félix R. Argueda (guitarra afroperuana)- para ofrecer una clínica y brindar un concierto, la primera en el Teatro Sarmiento y el segundo en el Museo Provincial de Bellas Artes Franklin Rawson, donde compartirá con los locales Alquimia Cuyana (ver aparte).

"Estoy con unas expectativas muy grandes de ir allá a San Juan. Espero que haya mucha gente que quiera escuchar esta cultura afroperuana… Me he enterado que hay una comunidad peruana muy grande en San Juan; así que para ellos y para los hermanos argentinos, va nuestra música y nuestro cariño’, expresó el artista en charla con DIARIO DE CUYO, antes de su llegada a la provincia.

– ¿Cuándo hizo de esta pasión su profesión?

– Yo ya tocaba el cajón cuando estaba en el secundario. Luego comencé a tocar con gente profesional sin ser yo profesional, pero me acogieron por demás muy bien y me motivaron para seguir adelante. Ellos veían que yo tenía algo, sin saber bien que era, pero ahí estaba…

– El don…

– Sí, exacto…

– Fue autodidacta…

– Al principio sí, luego ya estudié música con grandes maestros en Perú. Siempre me gustó explorar los ritmos del cajón…

– ¿Qué lo sedujo de este instrumento?

– El sonido, que te lleva directamente al corazón, al alma… El hombre puede expresar sus penas, sus tristezas, sus alegrías, los pensamientos más sublimes de querer un mundo mejor…

– Música con sustancia…

– Totalmente. Yo creo que nosotros venimos a esta tierra a dar un mensaje. Los peruanos y los afroperuanos vienen de una raíz muy sufrida…

– Pero a su vez su música es alegre… ¿es la manera de llevar ese dolor?

– Exacto… en Perú tenemos un dicho que es "cualquier pesar me divierte". De las penas hacemos alegría, es la manera de llevarlas, es así…

– ¿Qué significa el Grammy en su carrera?

– Muchas sensaciones. Fue un disco que se había grabado hace muchos años con mucha gente valiosa, estaba dormido y cuando salió a la luz fue una sorpresa que ganara el Grammy. Pero para mí fue la consecuencia de lo que venía uno haciendo ¿no?. Pero te lleva a seguir trabajando más…

– No es un "gané un Grammy, ya llegué"

– Para nada. Uno como músico nunca se puede dormir en los laureles, la responsabilidad es mucho mayor. De todos modos, el mejor reconocimiento es el de la gente, en cada lugar a donde vamos.