La Villa protagonista:

El regreso de Eduardo Magallanes a Villa Obrera sirvió para pacificar un ambiente que se había deteriorado en el abrupto final de la temporada pasada. Así, se rearmó el plantel con las llegadas de Leonardo Avila, Andrés Segura, Lucas Rodríguez, Franco Díaz, Alejandro Vega, Jorge Olivares, Facundo Reyes, Andrés Pastoriza y la vuelta de Federico Aballay, tras su paso por Atlético Alianza. A esos nombres, el Cachilo le agregó la base que tenía con Roberto Soria, Franco Lepe, Darío Aballay, Hernán Alvarez y Jorge Steiner. Con casi todo definido, Magallanes espera por la llegada de un carrilero derecho que podría ser Roberto Martín y confía en que habrá protagonismo asegurado: ‘Cuando acordamos con la dirigencia, el pedido fue mantener la categoría en el Federal B y sumar en el Oficial local, pero como nos armamos y sabiendo que de locales somos fuertes, aspiramos a mucho más’.

Colón: orden y calma:

El ascenso del 2014 al Federal B sirvió para que Colón Junior decidiera una nueva forma de manejarse en lo institucional y en lo deportivo. Por eso no fue casual la decisión de darle continuidad al ciclo de Ernesto Fullana como entrenador Merengue pero además, desde las dirigencia que encabeza Pedro Rodríguez fue clave el orden, la mesura y la franqueza para armar el nuevo plantel ofreciendo lo que se podía pagar sin embarcarse en aventuras que generan deudas. Así, Colón se rearmó con los regresos de Mario Pacheco y de Wilson Ruarte desde los equipos del Federal C y el Torneo de Campeones, pero además sumó a Matías Saffe (arquero), Omar Díaz (defensor), Ramón Avila (delantero) y Rodrigo Jofré (volante). Poco pero puntual como para cumplir con todos. Además, en obras, la mejora del piso del campo de juego es notable luego de concretar el riego por aspersión y la construcción de la pileta para 40 mil litros de agua. Colón prioriza el orden pero dará batalla.

Alianza recortó gastos:

En Santa Lucía cambiaron los tiempos. De aquellos planteles plagados de nombres rutilantes y con una inversión exagerada, ahora decidieron otra política: la austeridad. Pero en la conducción técnica se decidió darle la chance a Miguel Sánchez quien venía de mostrar sus aptitudes en el fútbol del Federal C y a partir de eso, se armó un equipo con pocos nombres, apoyado en una base y reforzado con varios elementos que esperaban también esa oportunidad. Llegaron Cristian Espinoza (arquero de Boca de Los Berros), Emanuel Gil (defensor), David Cano (delantero), Martín Marinero (defensor San Miguel), Jonathan Tejada (volante San Martín), Ezequiel Parra (delantero) y los hermanos Paulo y Elias Ovalle (delantero y volante de Arbol Verde). Sánchez apunta a estar entre los cuatro primeros de la clasificación: ‘Hay una base con experiencia y los chicos que llegaron tienen todo para mostrarse. Alianza será protagonista en los puestos de clasificación’.

Del Bono quiere lo suyo:

En la Esquina Colorada llegó la renovación para este Federal B con la asunción de Alejandro Schiapparelli como entrenador del conjunto de Del Bono que luego de una temporada que se estiró en la Copa Argentina, vuelve al ruedo para buscar el protagonismo en esta nueva temporada. Con entrenador nuevo, el Bodeguero apostó por mantener la base histórica con Sergio Córdoba, Elvio Illanes, Juan Tapia y Matías Molina, agregándole refuerzos con experiencia como el delantero Victorio Martiní o el volante cordobés Ernesto Ceballos para terminar de armar una escuadra combativa y con personalidad para hacerle frente al que sea. Además se reforzó con Gerardo Pinto (volante), Enzo Lerga (delantero), Nicolás Molina (defensor) y varios arqueros como Marcos Mamani, Ramiro Sierra y Cristian Cejas. Con ese plantel, la meta del Bodeguero apunta a ser el de siempre, que en la Esquina Colorada no perdona y que afuera, siempre busca lo suyo.