– ¿Quién va a ser el candidato de su espacio a sucederlo en la Gobernación de San Luis?

– Vamos a ver. No es fácil…

– ¿Ya tiene el nombre y no lo quiere decir?

– Tengo el nombre y no lo digo; y no te voy a decir nada del nombre (risas). No te voy a decir si es hombre, si es mujer. No es fácil. Primero desatamos una interna, todavía no tenemos fecha. Pusimos fecha, no le gustó a la oposición, la cambiamos, posiblemente sea el 23 de octubre.

– ¿Se termina la era Rodríguez Saá en San Luis?

– Sí, sí, se termina.

– ¿Qué opina de la re-reelección en San Juan?

– Yo felicito el manejo democrático que ha resultado. No me impresiona para nada que se introduzca la re-reelección, que San Juan tenga una mirada distinta sobre la Constitución. Al contrario, me parece bien, que tengan una experiencia. Nosotros tuvimos una experiencia similar y nos dio un resultado excelente. También es cierto que fue un buen gobernador y que el pueblo eligió y cumplió. El Adolfo anda caminando por la calle, la gente lo quiere muchísimo. Si se presenta a una elección seguro que la gana, llevó mucho progreso para San Luis. La norma no alcanza, hay que ganar elecciones. Espero que a los sanjuaninos les vaya en forma parecida. Personalmente, yo en San Luis la saqué, propicié la reforma constitucional para sacarla y me siento orgulloso, pero no hago una cuestión fundamentalista de que esta norma exista.

– ¿Esperaba que Macri se bajara de la candidatura presidencial?

– Mirá, esto sucedió en todas las fuerzas políticas. Se estrellaron frente a una frustración sobre aquel tema de "la señora gana" y después "elijan un solo candidato". Ni la señora gana ni hay que elegir un solo candidato. Esta dirección única que se marcó, que lo hizo el pensamiento de la politología, los comunicadores, generó al final una implosión en los partidos. No es que se bajó sólo Macri: se bajó él, se bajó Solanas, en el radicalismo pasaron cosas, en el Peronismo Federal pasaron cosas, en el propio gobierno pasaron cosas. Muchos se comieron el amague de que había que elegir un solo candidato. Los K empezaron a decir que había que elegir muchos candidatos para los colectores y empezaron a estrellarse unos con otros. Y en el mundo anti K empezaron esto de vamos a hacer alianzas y con cualquier colectivo me lleva bien y se estrellaron esto de los límites. Está bueno que haya sucedido, porque ahora vuelve a ser democrático todo.

– En la implosión del Peronismo Federal, ¿qué debería pasar para acordar con Duhalde?

– Con Duhalde podemos acordar mañana. Es re-fácil, tiene que venir y darme la mano y decirme "ganaste Alberto", y se acabó. "Hermano, muy bien, ya está…"

– ¿Sería impensado dar un paso al costado?

– Yo le he ganado a Duhalde. En una disputa a ocho juegos, empatamos el primero y le di la mano, empatamos el segundo y le di la mano, gano el tercero y él se baja. Entonces, ¿quién ganó?

– Después del discurso de Cristina en José C. Paz, ¿la ve desistiendo de ser candidata o cree que es una estrategia?

– Es la implosión también del oficialismo por esto de llevar muchas colectoras. A la señora le pasó, anoche (por el jueves) lo vimos. Con muchas colectoras se empieza a pensar que Cristina no gana el gobierno de Buenos Aires y que no es tanto eso de que "Cristina gana". El gobierno se quedó sin estrategia electoral. Ahora seguramente vamos a ver una construcción distinta, vas a notar en estos días que se profundizan las luchas, que no creo que suceda, o va a haber una introspección.

– ¿Se imagina al sindicalismo con un papel clave en la construcción kirchnerista?

– Por supuesto, va a incidir. Pero los sindicatos tendrían que tener transparencia y no la tienen, se deberían democratizar y elegir con controles judiciales; y todo esto no sucede.

– ¿Se puede gobernar sin el sindicalismo?

– Por supuesto, no hay que gobernar con el sindicalismo. El sindicalismo no es parte del gobierno. Cumple un rol maravilloso de defender a los trabajadores, pero no puede gobernar.

– La expresión peronista de su sector ¿se disputa la misma fracción de votos con el kirchnerismo o son votos distintos?

– Yo estoy seguro, por eso me animo a la elección y tengo mucha confianza, que en la segunda vuelta le voy a restar yo votos a la señora. El programa mío es mucho más afín con la historia y el futuro del movimiento peronista.

– ¿La da entonces como candidata?

– Sí, sí, va a ser ella la candidata. Es muy difícil que no sea ella, porque significaría la renuncia a un liderazgo y es muy raro que suceda.

– A diferencia de lo que dice en la Nación, ¿en los armados provinciales se puede dar un único frente opositor?

– Yo no estoy de acuerdo. Estoy de acuerdo con las ideas, pero cada uno hace lo que le parece. Si las ideas son comunes, tienen que militar juntos. Si no son comunes, no.

– ¿Podría gobernar una amalgama tan heterogénea?

– A ver, yo no me quiero meter en la política de los sanjuaninos. Ustedes tienen el viento Zonda, que los hace recontrabravos. Los sanjuaninos son bravos. Son muy especiales, no me meto para nada ni quiero meterme (risas).

– ¿Cómo interpreta la ausencia de Mauricio Ibarra en su recepción?

– No… a mí no me perturba para nada. Yo vine a esta fundación con Roberto, una personalidad de la política de San Juan que respeto, admiro y quiero mucho. No tengo ningún problema.

– ¿Sabe que su visita despertó diferencias entre algunos opositores?

– No, no tengo idea. Contámelo vos.

– Ibarra cuestionó que Basualdo se defina por un candidato a presidente sin acordarlo con sus potenciales socios y cuando no hay nada armado todavía…

– Yo la referencia la puedo hacer distinta. Es necesario en la política conocer los programas y los liderazgos para elegir. Si no, ¿cómo se hace? No se puede elegir en un cuarto cerrado sin conocer los candidatos ni la propuesta política.

– ¿Quién le gustaría que sea su candidato a gobernador en San Juan?

– Bueno… lo tienen que elegir los sanjuaninos. Pero si estoy acá, me parece que está todo claro, ¿no?

– ¿Basualdo entonces?

– Yo no he dicho nada (risas).

– ¿Sabía que Basualdo ha dicho que no va a ser candidato a gobernador y que es precandidato a senador?

– Bueno… lo decide cada uno. No te podés poner en ese lugar. Si él es quien decide, me parece muy bien.