Mauricio Macri continuará su estrategia electoral buscando mantener la polarización con el kirchnerismo, que en los últimos tiempos se dio a partir de distintos episodios, pero intentando que el precio de esa confrontación no lo desgaste como candidato presidencial para el 2011. "Nunca le pegues a un tipo que tiene mucha imagen positiva’, solía decirle a Macri su asesor ecuatoriano Jaime Durán Barba. Pero cuando el matrimonio presidencial comenzó a caer hasta perder en los cuatro principales distritos las elecciones legislativas, había llegado el momento de salir a dar pelea. Quienes elaboran a diario la estrategia a seguir -Durán Barba se encarga de el asesoramiento "macro’- saben que la polarización con los Kirchner benefició a Macri porque "es él o ellos’, pero admiten que el costo es alto. El caso de las escuchas ilegales con el "Fino’ Palacios y Ciro James provocó un desgaste, pese a eso, es momento de salir a confrontar con el juez Oyarbide. "Kirchner sabe que le conviene que del otro lado esté Macri, pero lo quiere desgastado, no fortalecido como está, si no Mauricio le gana en las presidenciales’, analiza un colaborador del Jefe de gobierno porteño. Quien también considera que Macri "es el líder natural’ de una oposición, carente de referentes y con muchas complicaciones para construir. También se admite que "hay contactos’ en las segundas líneas del macrismo con el duhaldismo "y se van a empezar a intensificar’ después del Mundial de Fútbol de Sudáfrica, porque el PRO sabe que la única manera de consolidar la candidatura de Macri es con una alianza con un sector del peronismo. Y porque, aseguran, "lo único que quiere Duhalde es la derrota de Kirchner’, por lo que está abierto al diálogo. En ese esquema, cerca de Macri reflexionan que es más probable que la reforma política, con las nuevas reglas para las elecciones, no se implemente en el 2011 "porque falta tiempo para aplicarla’ en todo el país. Sobre De Narváez, en la sede del Gobierno de la Ciudad hay voces disonantes, ya que algunos sostienen que no saben "cuál es su objetivo’ y creen que es un contrasentido que quiera "competir en la interna del PJ que establezca Kirchner y al mismo tiempo criticar a Duhalde’. Si bien algunas encuestas adjudican al jefe comunal una mayor imagen positiva en la provincia de Buenos Aires que en la Capital, hay dirigentes del PRO que evalúan que "Macri necesita a De Narváez como candidato a gobernador bonaerense, si no se va a complicar el panorama porque no hay otro candidato’.

Hay otro tema que inquieta a Macri: su sucesor o sucesora en la Ciudad. Hay dos alternativas que están siendo evaluadas y dividen a algunos ministros del gabinete: 1) que las elecciones vayan separadas de las nacionales y se capitalice la figura de Gabriela Michetti y sea un efecto cascada que favorezca al proyecto nacional; 2) que las elecciones sean simultáneas, pero en ese caso el nombre de Horacio Rodríguez Larreta se hace fuerte junto con la alternativa Michetti. Macri todavía no lo tiene definido. Un funcionario aclara que la idea de Macri es fortalecer el PRO hasta fin de año y después avanzar en alianzas. Pero los tiempos en política, muchas veces se adelantan.