La calificadora Moody’s redujo ayer de “estable” a “negativa” la calificación de fortaleza individual de 30 bancos argentinos, así como también la perspectiva de las calificaciones de depósitos en pesos de 24 entidades financieras, debido al “alto grado de correlación entre sus perfiles crediticios” y el del Gobierno nacional.

También redujo en el mismo sentido la perspectiva de las calificaciones de deuda en moneda local y extranjera y las calificaciones de emisor de algunas entidades. “El cambio deriva de la modificación de perspectiva a negativa desde estable, de la calificación B3 de los bonos soberanos, tanto en moneda local como extranjera, del pasado 17 de septiembre”, explicó Moody’s.

La agencia destaca “la alta correlación entre la solvencia de las entidades y la solvencia del gobierno argentino, considerando factores como el grado de dependencia del negocio de las entidades del entorno macroeconómico y financiero local, la exposición directa e indirecta de estas entidades al gobierno y el bajo nivel de diversificación internacional de sus operaciones”.

Moody’s atribuye el cambio en la perspectiva al “alto intervencionismo oficial en la economía poco favorables para la generación de ganancias de las entidades”. La agencia menciona “la aplicación de mayores controles de cambio. Estas medidas junto con la modificación de la carta orgánica del BCRA suscitan dudas”.

Según se informó, entre las entidades afectadas se encuentran: Banco Columbia, Comafi, Galicia, Banco de Servicios y Transacciones, Macro, Saenz, Supervielle, Caja de Crédito Cuenca, Compañía Financiera Argentina, Metrópolis, Cordial, Patagonia y GPat Compañía Financiera.

También afectó a: Mercado a Término de Buenos Aires, Credicoop, Córdoba, Santiago del Estero, Chubut, Tucumán, Finansur, Industrial, Piano, Nuevo Banco de La Rioja, Cetelem, HSBC, Santander, Banco Ciudad, Piano, Itaú y Standard Bank.

Fuente: DyN